España

Junts pel sí no llega a la mayoría absoluta sin pactar con la CUP

  • Juanan Jiménez
  • Especializado en información nacional e internacional, breaking news, periodismo de datos y visualización, también escribo sobre motor y tecnología.

Los ciudadanos catalanes están llamados a las urnas el próximo domingo 27 de septiembre. La campaña entra en su última semana y los diferentes sondeos arrojan resultados dispares. La gran pregunta es si Junts pel sí llegaría a los 68 escaños que otorgan la mayoría absoluta en el Parlamento catalán.

Las encuestas más optimistas fijan el techo de Artur Mas, Junqueras y compañía en los 67 escaños. En este escenario, Junts pel sí necesitaría a la CUP para cerrar el círculo independentista y lograr el control total sobre la cámara. Parece imposible que la lista conjunta de CIU y ERC alcance ese objetivo.

El resto de fuerzas políticas apuran las horas de campaña intentando movilizar a la masa de ciudadanos que optaría por quedarse en casa. Ciudadanos, PP y PSC han tirado de calculadora y saben que para arañar los votos suficientes para sumar más escaños es necesario que la participación sea bastante alta. En 2012, acudió a votar el 67% de los electores, la cifra más alta desde que se celebran elecciones al Parlamento catalán.

Ciudadanos, con Inés Arrimadas como cabeza de lista, obtendría el mejor resultado de la formación naranja hasta la fecha: 20-23 escaños. El partido de Albert Rivera obtuvo en las elecciones de 2012 nueve escaños. El salto cuantitativo de Ciudadanos es abismal con respecto a los resultados del resto de partidos políticos convirtiéndose en la primera fuerza constitucionalista en Cataluña.

Los dos grandes partidos nacionales, PP y PSOE, siguen sin reencontrarse con su viejo electorado. El Partido Popular ha logrado frenar el batacazo que se avecinaba. Gracias a la figura de Xavier García Albiol el partido que gobierna España si sitúa en el entorno de los 12-13 parlamentarios, mejorando los resultados cosechados hace tres años con Alicia Sánchez Camacho. En cuanto al PSC, su descalabro parece asegurado. El Partido Socialista fue la segunda fuerza en el parlamento autonómico catalán con 28 diputados tras las elecciones de 2010. En la siguiente cita electoral (2012), el número se redujo a 20. A día de hoy, las encuestas le otorgan un máximo de 16 escaños, perdiendo de nuevo terreno sobre el Partido Popular y siendo superado por los partidos emergentes como Ciudadanos o Catalunya sí que es pot.