El irónico desayuno del golpista Rull en la cafetería: tortilla española, jamón y vino tinto
El golpista Josep Rull, diputado de JxCat, ha disfrutado en el Congreso de un desayuno nada separatista. Acompañado de Laura Borraás, mano derecha de Carles Puigdemont, ha disfrutado de un pincho de tortilla española, un montado de jamón y unas copas de vino tinto.
Qué ironía el desayuno de JxCat en el Congreso de los Diputados en la conformación de la XIII legislatura. Josep Rull, diputado de JxCat y procesado por el Tribunal Supremo como uno de los músicos políticos que orquestaron el golpe de Estado en Cataluña en 2017, ha aprovechado el permiso del Alto Tribunal para degustar un desayuno en el que, precisamente, no había ni rastro de fuet o pan tumaca. El dirigente separatista en prisión preventiva en Soto del Real acusado de un delito de rebelión, así como sus acompañantes de grupo parlamentario, entre ellos Laura Borras, la mano derecha de Carles Puigdemont, han disfrutado de un pincho de tortilla española y un montado de jamón –desconocemos si es jabugo– aliñado con unas copas de vino tinto.
La tortilla o el jamón, que encarnan los ingredientes estrella de nuestra España opresora, gusta a todos por igual ya sean constitucionalistas o golpistas. No cabe duda de que no hay nada más democrático que la muerte y los placeres mundanos, son dos cosas de las que ningún humano, aún no compartiendo ideales políticos –sean o no delirantes, como es el caso de la existencia de una república catalana tan buscada por los dirigentes separatistas–, de las que ningún ciudadanos españoles ni puede –ni debe–despojarse. No obstante, siendo la tortilla y el jamón, así como el vino tinto, tres símbolos tan españoles, sorprende que hayan formado parte del amigable y cómodo desayuno del que han disfrutado los separatistas en la cafetería de la Cámara Baja.
Rull ha llegado al Congreso junto a Jordi Sànchez, Jordi Turull y Oriol Junqueras, líder de ERC, para asistir a la conformación de las Cortes tras las elecciones del pasado 28 de abril. Todos han entrado en el Hemiciclo entre aplausos que procedían de las bancadas de ERC, JxCat y EH Bildu, mientras el resto de partidos, a excepción de Podemos, contemplaba con rostros arcaicos los insólitos hechos que acontecían.
Junqueras y Pablo Iglesias se han saludado de manera amigable a su llegada a la Cámara Baja. El turno de saludo del diputado de ERC al presidente en funciones, Pedro Sánchez, ha tenido lugar una vez que ha concluido la votación que ha convertido a Meritxell Batet en la nueva presidenta del Congreso de los Diputados. Momento en el que Junqueras ha aprovechado para decir al socialista: «Tenemos que hablar», tras un «¿Cómo estás?» del secretario general del PSOE.