Ayuso: «Mi pareja no se ha aprovechado de nada, no parece que sea el caso de Begoña Gómez»
Ayuso: "Sánchez utiliza a través de Alberto todo el odio personal que me tiene"
"A Sánchez le diré 'me gusta la fruta' siempre que hable de mi familia"
Vea aquí la entrevista completa de Eduardo Inda a Isabel Díaz Ayuso
Isabel Díaz Ayuso aborda, rotunda, la persecución a Alberto González Amador. En esta entrevista con el director de OKDIARIO, Eduardo Inda, la presidenta de la Comunidad de Madrid, se reivindica como «una mujer libre e independiente» e insiste en que su pareja es «una persona anónima» que «nunca ha aprovechado ninguna circunstancia para hacer negocios». Advierte que «utilizar todos los poderes del Estado para hacer daño al adversario político» es propio de «los Estados dictatoriales». Ayuso defiende la inocencia de su pareja y asegura que «no se ha aprovechado de nada, no parece que sea el caso de Begoña Gómez».
PREGUNTA.- Hablemos de su persecución familiar. Primero fueron a por su padre, que no está con nosotros desde hace diez años. Después, a por su hermano, y la Justicia dijo que no había delito. Ahora, han ido a por su pareja, Alberto González Amador; esta campaña ¿ha erosionado su relación?
RESPUESTA.- Sánchez utiliza a través de Alberto todo el odio personal que me tiene y mueve a todo el Gobierno y a todos los poderes para ir contra un ciudadano que, de no ser mi pareja, no estaría en esta circunstancia ni de lejos. El otro día, en los pasillos de Plaza de Castilla había diputados de Más Madrid y hay abogados del PSOE personados. Eso te demuestra en lo que estamos.
P.- Y, ¿ha erosionado su relación?
R.- Nunca he hablado de él, nunca he oficializado esta relación, nunca le he presentado y a nadie le importa.
P.- Desde luego, ha sido discreta y diría que casi clandestina.
R.- No, simplemente soy una mujer que defiende su papel en política por mí misma y no por mi pareja. Hace poco me preguntaban si iba a ir con él a la boda de Almeida. Me parece antiguo tener que ir acompañada. Yo siempre voy sola, encantada y muy bien acompañada por quien esté: gente de mi equipo, de mi gabinete o por nadie. En todos estos años no he hablado de mi pareja ni mi pareja ha aprovechado ninguna circunstancia para hacer negocios, como parece que no ha sido el caso del presidente del Gobierno. Es una persona anónima, somos adultos y cada uno tiene su vida. Yo soy una mujer libre e independiente. Aunque les cueste creérselo a algunos puritanos de la izquierda, en la derecha hay mujeres libres que trabajamos y no necesitamos exhibir nuestra vida personal.
P.- ¿Están ejerciendo el machismo contra usted? Parece que la mujer, como con Franco, tuviera que depender de un hombre.
R.- A mí me podrían pedir explicaciones si me pagaran las cosas como al presidente, que tiene cinco palacios, dos Falcon, el de repuesto por si llega tarde a una comunión, el helicóptero… O como algunos ministros, que hacen reformas millonarias en sus despachos para ponerse caprichos. Pero yo nunca le he costado un euro al contribuyente en mi vida personal. Siempre he vivido con austeridad. Vincular una relación sentimental con una labor política y utilizar todos los poderes del Estado para hacer daño al adversario político tiene otros nombres y otros tintes. Y eso es lo realmente peligroso.
P.- ¿Qué nombres y qué tintes?
R.- Pues se acerca mucho a los Estados dictatoriales. Es la utilización de todas las herramientas del Estado para dañar la alternancia política y al adversario político a través de los aspectos personales.
P.- ¿Ha habido machismo en toda esta polémica?
R.- Si dijeran que le he beneficiado para que le den algo lo podría explicar, pero, como no ha sido así, yo soy una mujer libre e independiente que no tiene que dar explicaciones de su vida privada. Les guste o no, tengo una maravillosa vida privada que cuido, alimento y eso nos hace ser políticos normales.
P.- Pero, ¿ha habido machismo? No me contesta…
R.- Es que nunca me ha gustado usar lo del machismo… Es verdad que cuando el ministro famoso dice lo del «testaferro con derecho a roce» te das cuenta de los personajes de los que estamos rodeados.
P.- Eso lo dice un señor del PP y se tiene que ir a vivir a Australia o a Marte.
R.- Lo que veo es que las del yo sí te creo, hermana utilizan las pancartas para hacer el ridículo y no representan a la inmensa mayoría de las mujeres. Se han callado cuando han violado, torturado y exhibido como trofeos a miles de mujeres judías por las calles de Gaza. No han salido a defenderme cuando han sacado un muñeco mío, destripándome, en procesión por la Castellana. Y callan como puertas cuando me intentan desprestigiar desde el aspecto personal. Eso es comunista, una persecución muy propia de Estados dictatoriales. Pero, para victimizarnos, ya tenemos al presidente y el serial de La Moncloa, con su mujer. Hasta que no vea la inspección fiscal a su hermano, que no entiendo cómo no ha empezado, como le han hecho a mis familiares, a todos los relacionados con la trama de corrupción de Koldo y Ábalos y de ministerios y de organismos públicos y de presidentes autonómicos; hasta que no vea sus caras en una lona colgada a 10 metros de altura; hasta que no vea cámaras de televisión en los colegios de sus hijos… no tiene derecho a hacer ese circo y a poner el ventilador para lloriquear y decirle al mundo que la democracia le debe algo y que si él se va se acaba la democracia. No, tú tienes que dar explicaciones, como las damos todos y dejar de manosear las instituciones a tu antojo.
P.-¿Se equivocó en la gestión del no-caso Ayuso o el caso González Amador?
R.- Es que no sé qué he hecho, no sé en qué me he equivocado. ¿Tener una relación con él? Yo no he organizado una rueda de prensa ni he utilizado las instituciones. Las únicas veces que hablé fue porque me lo pidieron los medios. Desde entonces, y mira que han pasado cosas muy gordas, como que la Fiscalía está rota en dos, que el fiscal general del Estado tiene un problema con la Justicia que puede hacerle caer -en un país democrático hubiera caído el presidente del Gobierno-, me estoy manteniendo al margen de todo. Él se tiene que defender solo. Pero en lo que no puedo callarme es en la utilización de los poderes del Estado contra los ciudadanos. Porque el siguiente vas a ser tú, un medio que no le haga gracia al Gobierno, el periodista de turno…
P.- No lo dude, a por nosotros han venido y seguirán viniendo.
R.- Cuando se abran inspecciones fiscales a toda la gente incómoda, se troceen sus datos personales en los medios de comunicación afines y cuando la Fiscalía los filtre de manera ilegal para hacer daño al adversario, todo el mundo empezará a entender de lo que estamos hablando. Esas prácticas mafiosas y corruptas son las que no se pueden consentir. Y todo eso, mientras se tapa una verdadera trama. Que hay nueve pistolas de Koldo y 20 detenidos…
P.- No eran sólo pistolas, había rifles y escopetas. Un arsenal que parecía el de la Policía Nacional.
R.- Intentar tapar todo esto con una inspección fiscal es absurdo. Demuestra la impunidad con la que se creen.
P.- ¿Ha delinquido el fiscal general del Estado con su pareja?
R.- Eso es lo que la Justicia investiga y se tiene que clarificar en el juzgado. Pero, a todas luces, lo que aquí ha ocurrido no es normal. No se le ha tratado como a un ciudadano normal y se están utilizando las instituciones para airear su vida, manipularla y para machacarlo, en lugar de defenderlo. Los ciudadanos que sean objeto político para el Gobierno de Sánchez estarán destruidos y desamparados. Ése es el mensaje que nos está dejando este asunto.
P.- Siempre digo que los presuntos delitos se cometieron antes de que ustedes se dieran el primer beso, con lo cual tiene gracia que le endosen este lío.
R.- Llega un momento en que la verdad no importa. Lo importante es cómo conseguimos olvidar por qué el secretario de Organización del PSOE tenía una red organizada en la pandemia que creó un sistema de compra fraudulenta y defectuosa, poniendo en peligro a los sanitarios y a los ciudadanos. A la desesperada, el Gobierno de Sánchez ha sido capaz de montar todos estos seriales contra un particular, con el caso de Begoña… Incluso con los disparates contra el presidente argentino.
P.- ¿Qué le parece que Óscar Puente llamase drogadicto a Javier Milei?
R.- Demuestra que esta guerra la empezó el Gobierno.
P.- ¿Usted considera que Begoña Gómez es una corrupta, como dijo Milei?
R.- Eso lo tiene que decidir un juez, a quien también han empezado a acosar. Desde luego, ha realizado negocios impropios de la mujer del presidente del Gobierno. Nunca se había visto algo así.
P.- ¿Son corruptelas?
R.- Es hacer negocios en nombre de su papel, consiguiendo supuestos favores del Consejo de Ministros. Y, para taparlo, se ha provocado una crisis institucional con Argentina de una magnitud sorprendente. Es un auténtico escándalo.