Los Reyes congelan sus viajes a Marruecos y Cuba por el golpe de Estado independentista
Aunque el Palacio de la Zarzuela no admite una relación directa entre la grave crisis política española causada por los independentistas catalanes con el parón en la preparación de los viajes de los Reyes a Marruecos y a Cuba, todo indica que sí existe una relación causa-efecto entre los dos hechos. En principio, la visita de Estado a nuestros vecinos del norte de África estaba prevista para este otoño, aunque no había aún fecha fijada por los responsables de las relaciones exteriores de los dos países. Fuentes del Ministerio español aseguran que sí ha habido contactos entre los dos reinos, cuyos monarcas mantienen una estrecha relación de carácter casi familiar, para preparar el viaje pero que las fechas no están decididas ya que Mohamed VI tiene una agenda muy intensa con numerosos desplazamientos al exterior.
En el caso de Cuba, es muy significativo que tanto por parte de la Casa de S.M. el Rey como por la del Ministerio de Asuntos Exteriores español se obvien las palabras del ministro Dastis cuando afirmó en La Habana a principio del mes de septiembre que se trabajaba en la preparación del viaje a Cuba de los Reyes con un horizonte temporal claro y fijado por la retirada del poder del presidente Raúl Castro, previsto para febrero. Fuentes del Palacio de la Zarzuela aseguran que no se ha empezado a preparar la logística del viaje, bastante complicada por las peculiares condiciones políticas y sociales de la isla caribeña. Y en Exteriores manifiestan que nunca se dijo que la visita del rey Felipe y la reina Letizia iba a realizarse en el mes de enero.
Lo que sí es cierto es que a la complicada situación política española, que ha provocado el hecho sin precedentes de dejar vacía la agenda de la Familia Real durante tres semanas en el mes de Octubre, se une el cambio de escenario en Cuba. Debido a la política del presidente Trump, que está destruyendo todos los avances que realizó su antecesor Barack Obama, se aleja la posibilidad de acercar posiciones y dar pasos efectivos para eliminar el embargo de los Estados Unidos a la isla.
Lo que parece bastante claro es que las visitas de Estado de los Reyes a dos países tan significativos para las relaciones exteriores de España como Marruecos y Cuba han pasado a un segundo plano y la prioridad es atender la situación interna española. Es verdad, como afirma el Palacio de la Zarzuela, que las relaciones exteriores no se desatienden y prueba de ello son las recientes visitas a Madrid del presidente de Israel, del 5 al 7 de este mes de noviembre, seguida dos semanas más tarde por la del presidente palestino. Un buen signo de la confianza expresada por los dos máximos representantes de dos países antagonistas a la posición de España respecto al conflicto árabe-israelí.