Economía
Cuentas públicas

Sánchez vuelve a situar a España como el país con el déficit público más abultado de la UE

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a situar a España como el país de la Unión Europea con el déficit público más abultado de la Unión Europea. El agujero de las cuentas públicas representó el 11% del PIB en 2020, el año de la pandemia, por encima del 9,7% de Grecia, el 9,2% de Francia o el 9,5% de Italia. En apenas un año se ha multiplicado por 3,4 el déficit nacional. 

Sánchez ha llevado a las arcas públicas a ese nivel de números rojos sin evitar que España sea el país del mundo desarrollado con el mayor descalabro económico y con la mayor tasa de desempleo con diferencia. Es decir, que el enorme gasto público que se ha movilizado en los últimos meses para afrontar la crisis del coronavirus no ha evitado que la economía española se sitúe ante una tormenta perfecta: números rojos y deuda disparados, descalabro del PIB y desempleo en cotas inasumibles para cualquier país avanzado.

Hay que retrotraerse a la época del expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, también socialista como Sánchez, para ver unas cifras de déficit público tan altas en la historia de España. En aquel momento, el país estuvo a punto de la quiebra y se tuvieron que hacer duros recortes que le costaron el Ejecutivo al PSOE.

Aunque Bruselas está con la guardia baja ante el gasto disparado por la pandemia, todo indica que tras la crisis las autoridades comunitarias volverán a exigir al Ejecutivo, a las CCAA y a los ayuntamientos que se aprieten el cinturón.

El detalle de las cifras en Europa

En 2020 todos los Estados miembros de la Unión Europea registraron déficit en las administraciones rojas. Los mayores agujeros presupuestarios se registraron en España (-11,0%), Malta (-10,1%), Grecia (-9,7%), Italia (-9,5%), Bélgica (-9,4%), Francia y Rumanía (ambos en el -9,2%) , Austria (-8,9%), Eslovenia (-8,4%), Hungría (-8,1%), Croacia y Lituania (ambos con un déficit del -7,4%) y Polonia (-7,0%), según la oficina estadística europea, Eurostat.

Todos los Estados miembros, excepto Dinamarca (-1,1%), tenían déficits superiores al 3% del PIB, el límite que se estableció según el Protocolo de Déficit Excesivo.

Catorce Estados miembro de la UE tienen ratios de deuda pública superiores al 60% del PIB, siendo los más elevados Grecia (205,6%), Italia (155,8%), Portugal (133,6%), España (120,0%), Chipre (118,2%), Francia (115,7%) y Bélgica (114,1%). Es preocupante que España tenga una deuda del 120% ya que en la anterior crisis, la de 2008, fue uno de los factores que permitió que España pudiera salir adelante. Los altos niveles de déficit en la actualidad complicarán, sin duda, el futuro de las próximas generaciones.

A finales de 2020 las proporciones más bajas entre deuda pública y PIB se registraron en Estonia (18,2%), Luxemburgo (24,9%), Bulgaria (25,0%), Chequia (38,1%) y Suecia (39,9%), según detalla Eurostat.

En 2020, el gasto público en la zona del euro equivalió al 54,1% del PIB y los ingresos públicos al 46,8%. Las cifras para la UE fueron 53,4% y 46,5%, respectivamente. En ambas zonas, el coeficiente de gasto público aumentó significativamente, mientras que el coeficiente de ingresos públicos aumentó solo ligeramente.