Economía
La posible mayor quiebra de la historia

La salvación de Abengoa depende de que el ICO acepte que Santander ponga el dinero de Andalucía

Los minoritarios exigen nombrar otro presidente y el consejo de vieja Abengoa nombrará un nuevo consejo en AbenewCo

Dimiten Gonzalo Urquijo y todo el consejo de ‘nueva’ Abengoa al fracasar el plan de salvación de la empresa

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

Tras los últimos acontecimientos, la salvación del grupo Abengoa del concurso de acreedores depende del ICO (Instituto de Crédito Oficial): el organismo público debe dar su visto bueno antes del 15 de enero a que Banco Santander ponga los 20 millones que se niega a aportar la Junta de Andalucía para avalare el crédito de 203 millones contemplado en el plan de refinanciación de agosto, según fuentes conocedoras de las negociaciones. Si se niega, la ingeniería sevillana se verá abocada a la suspensión de pagos, la mayor de la historia de España, salvo que se produzca una renegociación del plan con los accionistas minoritarios que se antoja muy improbable, o bien que e fondo de rescate de la Sepi entre en la compañía.

El viernes por la tarde, dimitió el consejo de la filial AbenewCo (‘nueva’ Abengoa, a la que se han traspasado los activos y el negocio de Abengoa) encabezado por Gonzalo Urquijo, al no poder completar a 31 de diciembre el plan de refinanciación  del grupo acordado con los acreedores en agosto y que dejaba como grandes perdedores a los antiguos accionistas de la matriz, Abengoa S.A. (‘vieja’ Abengoa). Sin embargo, el consejo de esta, nombrado precisamente por los minoritarios, aseguró que aún es posible alcanzar un acuerdo para salvar el concurso de acreedores.

Según las fuentes consultadas, esta última esperanza está en manos del ICO. Este organismo, dependiente del Ministerio de Economía de Nadia Calviño, condicionó su aval (del 70%) a un crédito de 203 millones (ampliables a 230) a que la Junta de Andalucía -gobernada por PP y Ciudadanos- aportara otros 20 millones de liquidez. Pese a comprometerse a ello, el Gobierno autonómico descartó el cumplimiento de dicho compromiso al no encontrar un encaje legal para ello, lo que provocó el continuo aplazamiento de la firma del plan y dio pie a la rebelión de los pequeños accionistas, que acabaron tomando el control de la matriz, la ‘vieja’ Abengoa.

Ante esta situación, el principal acreedor de la compañía, Santander, se ha ofrecido a aportar esos 20 millones. En teoría, debería ser irrelevante para el ICO quién pone el dinero mientras se alguien lo aporte, pero las fuentes aseguran que todavía no ha dado su visto bueno, el único requisito que falta para poder poner en marcha el plan de salvación de agosto y evitar el concurso. Las partes se han dado hasta el 15 de enero, el próximo viernes, para lograr ese visto bueno. Otra salida sería la entrada del fondo de rescate de la Sepi, en este caso dependiente de Hacienda, que quiere ampliar su objetivo para poder salvar a Abengoa y otras empresas en situación desesperada.

El consejo de ‘vieja’ Abengoa cree que aún es posible el acuerdo

El viernes pasado, el consejo de Abengoa SA emitió una comunicación a la CNMV en la que se retractaba de sus palabras anteriores, en las que aseguraba que alargar la refinanciación más allá del 31 de diciembre conduciría a la liquidación de Abengoa, y consideraba que «habiendo manifestado ya su no oposición a la ejecución de la operación de refinanciación que permitiría la supervivencia de todo el Grupo, considera que, habiéndose concedido un periodo adicional, existe todavía una posibilidad de cerrar la transacción para que Abengoa Abenewco 1, S.A., cabecera de los negocios del Grupo Abengoa, y sus sociedades dependientes, puedan disponer de las líneas de liquidez y avales comprometidas en la misma».

Dicho período adicional concluye el próximo día 15. Por ello, el consejo asegura que seguirá trabajando «para alcanzar el cierre de la operación de refinanciación del Grupo y garantizar su viabilidad» y que procederá a nombrar de inmediato un nuevo órgano de gobierno de AbenewCo, la ‘nueva’ Abengoa. De cerrarse esa refinanciación, Abengoa S.A. vería reducida su participación al 2,7% de AbenewCo, o incluso al 0% si, como todo indica, se declara el concurso de acreedores de la matriz, la ‘vieja’ Abengoa.

Los minoritarios quieren nombrar ya a su tercer candidato

Este consejo fue nombrado por los minoritarios de Abengoa S.A. agrupados en la plataforma Abengoashares, tras rechazar el plan de su primer candidato, Marcos de Quinto, que había logrado un acuerdo más favorable para ellos: una compensación ligada a la futura venta de AbenewCo. Pero sus nuevos representantes se alinearon inmediatamente con AbenewCo y se adhirieron al plan del 6 de agosto tras acceder a toda la información relevante y reunirse «con el equipo directivo, con representantes de los trabajadores, con los asesores externos y con la entidad (KPMG) autora de una valoración independiente». Algo que fue interpretado como una «traición» por los mismos minoritarios que los habían nombrado.

Ahora, su tercer candidato es el expresidente de Amper, Clemente Fernández, que propuso a finales de diciembre que los minoritarios inyectaran 22 millones como nuevo capital y también ha amenazado a los antiguos gestores con una querella por alzamiento de bienes. El viernes, la citada plataforma -que asegura contar con el 15% de ‘vieja’ Abengoa- volvió a pedir el nombramiento de Fernández y la convocatoria de otra junta extraordinaria tras las del 17 de noviembre y el 22 de diciembre.

Asimismo, consideró «una irresponsabilidad que Juan Pablo López-Bravo y Margarida de la Riva Smith [los dos miembros que quedan en el consejo nombrado por los mismos minoritarios que exigen ahora su dimisión] sigan al frente de la empresa e incluso piensen nombrar un nuevo consejo en Abenewco1 al pesar sobre ellos una moción de censura».