Meloni amenaza a Stellantis con expropiar dos míticas marcas italianas y dárselas a un fabricante chino
Giorgia Meloni quiere sacar partido de la ley del made in Italy, y podría expropiar dos marcas míticas, históricas para Italia, a Stellantis. En concreto, quiere la máxima dirigente transalpina que Autobianchi e Innocenti pasen a manos de una empresa que recupere sus insignias y vuelva a sacar brillo a sus modelos. Y no le importa que esa marca sea de China.
Dice el diario Il Sole 24 Ore, el diario italiano, que Meloni quiere ofrecerle esas dos marcas, Innocenti y Autobianchi, al fabricante de origen chino BYD, con quien ha sondeado incluso su interés. Pero también apunta a que está dispuesta a entablar conversaciones con Chery, Dongfeng o Great Wall Motors. Quien sea, pero que se comprometa a revitalizar los vehículos de origen italiano.
Es un giro importante, habida cuenta que Meloni, tras su llegada al Gobierno italiano, tomó justo la senda contraria, no renovando algunos acuerdos comerciales con China por el excesivo peso que tenía en sus relaciones comerciales. El cambio de rumbo se produce una vez se han implementado los aranceles, por lo que Meloni lograría, de una tacada, dos obejtivos: rescatar dos marcas italianas y que China tenga que producir en Italia.
En este supuesto se encontrarían tanto Autobianchi como Innocenti, marcas históricas de coches italianos que desaparecieron en 1995 y 1997, respectivamente.
En este caso el Ministerio de Finanzas podría, según el documento legislativo, «formular una solicitud de caducidad de la marca ante la Oficina de Patentes y Marcas. Y si la solicitud es aceptada, la Dirección Federal presenta una solicitud de registro».
Es decir, si una marca italiana considerada histórica no se utiliza durante más de un lustro ni se comercializa ningún producto bajo su nomenclatura, el Estado tiene plenos poderes para arrebatar al propietario todos los derechos y luego decidir qué hacer con ella.
Acorde a las informaciones publicadas por el rotativo, el Ministerio ya ha presentado la solicitud ante la oficina de patentes para que las marcas Innocenti y Autobianchi no se renueven y, de hecho, asegura que ya se han registrado versiones de los dos fabricantes utilizando gráficos diferentes a los producidos por el grupo Stellantis.
Meloni y Stellantis
Este movimiento del Gobierno de Meloni llega en plena crisis con el grupo automovilístico después de que la mandataria acusara al fabricante de descuidar sus fábricas de producción histórica en Italia.
De hecho, a mediados de mayo, la policía italiana confiscó 134 coches de Fiat importados de Marruecos que se vendían con los colores de la bandera del país transalpino en uno de los laterales, algo que podría ofrecer un falso indicio sobre el origen del producto.
Sin embargo, no es el único enfrentamiento entre las partes. En abril, tras la presentación del Alfa Romeo Milano, el ministro de Industria y Empresas del país, Adolfo Urso, criticó que se utilizara el nombre de la ciudad de Milán para un coche que se iba a producir en otro país, en Polonia, concretamente.
En consecuencia, Stellantis cambió el nombre de su vehículo y lo llamó Alfa Romeo Junior.