Europa, de la dependencia de Rusia a la dependencia de China…y Rusia

El litio (Li), es un metal alcalino, el más ligero y menos denso en estado sólido a temperatura ambiente conocido como el oro blanco y es un mineral cada vez más necesario, demandado y deseado para un mundo sostenible y China es el principal importador.
Se utiliza para vidrio y cerámica, para la fundición continua de acero y sobre todo para el almacenamiento de energía y tecnología en las baterías recargables de nuestros ordenadores portátiles y teléfonos móviles y es clave para las baterías de iones de litio para la movilidad eléctrica dado que presenta una conductividad eléctrica y térmica excelente por tener el potencial electroquímico más alto de todos los metales.
Para conseguir cumplir con los objetivos climáticos recogidos en los Acuerdos de Paris, la OCDE estima que la demanda de litio multiplicara por 42 los niveles actuales hasta 2040, una demanda difícil de cubrir además por el consumo elevado de energía de su propia extracción.
Su precio cayó un 80% desde sus máximos en el año 2022 ha destruido la oferta desde entonces lo que hace que a fecha actual no sea un negocio rentable para muchas de las 52 minas que extraen 1.181.000 tm para una demanda prevista en 2030 de 2.728.000 tm, más del doble de la producción actual. La previsión es que debido a la futura escasez del litio los precios se dispararán dado que las minas de litio tardan años en ponerse en funcionamiento para ser explotadas de forma eficiente.
Australia con 52% de la producción mundial y Chile del 25% gracias al Salar de Atacama dominan el suministro mundial de litio seguidos de China (13%) y Argentina (6%). El primer productor mundial extrae litio de las minas de roca dura del mineral espodumena (silicatos o fosfatos) con un procesamiento más rápido y de mayor calidad y los tres siguientes de la salmuera como cloruro en el agua de mar con menores costes de producción y un menor impacto en el medio ambiente.
China es el principal importador de litio
China produce litio. Es, además, su principal importador mundial y controla en la actualidad según la Agencia Internacional de la Energía el 80% del refinado del mismo dominando la producción del refinado y la mayor parte de la fabricación de las baterías de ion de litio mundiales, lo que está llevando a Europa y a los EEUU a inversiones cuantiosas para romper dicha dependencia.
China a través de Tianqi Lithium ha llegado a un acuerdo de compra de la australiana Essential Metals por 94 millones de dólares operación que incluye la explotación de unas reservas de más de 100.000 tm.
Tianqui ya era propietaria de la mina de Greenbushes en la parte occidental del continente australiano, así como la refinería de hidróxido de litio para baterías que ya poseía.
Cuatro empresas chinas se encuentran pujando por hacerse con el control de los importantes yacimientos bolivianos de litio frente a una empresa americana respaldada por el fondo Breakthrough energy Ventures propiedad de Bill Gates.
También China a través de Tíbet Summit se fijó en los recursos argentinos de la provincia de Salta, Salar de Diablillos, con una producción anual de 50.000 tm de carbonato de litio para baterías. Finalmente, en Chile adquirió en 2018 una importante participación del 24% de la chilena SQM y en 2022 la china BYD se adjudicó y la explotación de 80.000 tm de litio.
Los principales fabricantes occidentales de vehículos eléctricos Volkswagen, Ford y Tesla están adoptando la batería de litio-fosfato de hierro al ser estas más duraderas y baratas por lo que para evitar perder el contrato sobre la cadena de valor la apuesta por el litio es muy clara.
En Portugal también se explota el litio. No es el caso de Alemania y de España, ya lo descubrió la Roma imperial, donde existen 2700 minas y algunas de ellas de litio localizadas en Galicia, Castilla y León y Extremadura. La paradójica presión por una transición verde impide actualmente su explotación debido a la existencia de una legislación muy restrictiva en materia de explotación de yacimientos minerales desde el año 2011 no queda ninguna mina de litio activa.
Extremadura cuenta con el yacimiento de San José de Valdeflorez que según Extremadura New Energies podría producir 20.000 tm de hidróxido de litio suficientes para equipar con batería eléctrica un millón de vehículos.
Recordemos que Extremadura ya cuenta con una mina en Cañaveral y una giga factoría de baterías de la empresa china Envisión, la oportunidad para liderar el mercado es claro, pero hace falta mayor visión y una regulación que facilite esa explotación del oro blanco extremeño.
Si incorporásemos nuestros recursos mineros, señalados por varios proyectos de exploración, a las fábricas de montaje de vehículos eléctricos y de baterías, podríamos llegar a establecer toda la cadena de valor de la movilidad eléctrica.
Actualmente somos adictos al litio que importamos de China para las baterías sostenibles que usamos en Europa y el miedo es acabar siendo unos yonquis de este suministro crítico como en el pasado reciente lo fuimos del gas ruso.
Termino detallando otra paradoja sobre la publicitada sostenibilidad de los vehículos eléctricos al proponer analizar la posible huella de carbono de una batería que obtiene el litio en Chile, Bolivia o Argentina y se exporta a China para su refinado y se incluye en una batería fabricada en China para acabar en un vehículo en Alemania que se exporta a los EEUU con una vida media de 10 años.
Donde acabarán estos vehículos como destino intermedio tras la década inicial es la siguiente pregunta. Quizás en Asia o en África. Y la regulación de los vertederos de vehículos en la actualidad en dichos continentes deja mucho que desear.
Occasio utendi opibus strategicis
José Luis Moreno, economista, ha sido director de Economía en la Comunidad de Madrid y en el Ayuntamiento de Madrid. Analista económico y empresarial.