Economía
por la invasión de Ucrania

Calviño dice que no hay riesgo de falta de suministro de cereales pero avisa de un alza de los precios

La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha asegurado que no hay «ningún riesgo» de falta de suministro de cereales o fertilizantes en España por el conflicto en Ucrania, aunque ha advertido de la repercusión directa de la guerra en términos de precios, que podría provocar un encarecimiento de los mismos.

«España es uno de los países que tienen una autonomía más importante en el ámbito de los fertilizantes, pero es evidentes que estas tensiones en los mercados internacionales tienen una repercusión directa en términos de precios», ha explicado la vicepresidenta en declaraciones a los medios de comunicación, tras clausurar el acto ‘Legado a la Caja de las Letras’, organizado por el Instituto Cervantes con motivo del Día Internacional de la Mujer.

Así, la titular económica del Gobierno ha confirmado que el encarecimiento de los precios por la invasión de Ucrania por parte de Rusia es el canal de impacto «más directo» en el caso de España en lo referente al sector agroalimentario.

En este sentido, Calviño ha asegurado que el ministro de Agricultura, Luis Planas, está en constante contacto con los socios europeos y siguiendo la situación de los mercados internacionales de productos agroalimentarios, no solo desde la perspectiva del grano sino también desde la evolución de los precios de los fertilizantes, que son «muy importantes» para el sector.

Escasez de aceite de girasol

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha advertido este lunes contra la compra compulsiva de aceite de girasol procedente de Ucrania y ha aclarado que la posible falta del mismo no se concretará hasta la cosecha de este verano.

Ante la alarma generada por la posible falta de aceite de girasol procedente de Ucrania, la OCU ha transmitido en un comunicado, que «hoy por hoy» no debería existir déficit de este producto en los supermercados, ya que el que se está vendiendo ahora en los supermercados es de la cosecha del año pasado, antes de la guerra.

Además, la organización ha recalcado que para entonces podría impulsarse la producción nacional o la comercialización de otros aceites vegetales asequibles como el de soja, el de colza o el de orujo de oliva.