Calentón inmobiliario en Bolsa: Aedas, Metrovacesa y Neinor recuperan más del 60% desde mínimos

A pesar de que, salvo en el caso de Aedas, las promotoras españolas no recuperan en Bolsa niveles previos a la pandemia, suben más de un 60% desde los mínimos que registraron en 2020. El calentón inmobiliario, que ya comienzan a vigilar algunas instituciones como el BCE o el Banco de España, se hace notar en sus cotizaciones. La compraventa de viviendas en España alcanza ya máximos del boom.

“Las promotoras españolas están de fiesta”, apuntan los analistas de Renta 4, gracias al fuerte repunte de la demanda. El “hambre” inmobiliario ha resurgido en el país con el apoyo del covid-19. Por un lado, la pandemia ha provocado un incremento de la tasa de ahorro de los hogares, así como una demanda embalsada de vivienda y un cambio en las preferencias, que giran hacia la oferta nueva. Por el otro, la política monetaria expansiva adoptada por el BCE para favorecer la recuperación económica provocada por la crisis sanitaria ha dado como resultado un tipo hipotecario en niveles mínimos.

Aedas, Metrovacesa y Neinor

Aedas marcó mínimos en marzo de 2020 en los 12,70 euros. Desde entonces el precio de la acción ha subido casi un 90% y ahora cotiza por encima de los 24, con lo que recupera niveles previos al coronavirus. En Renta 4 destacan su “generación de caja a partir de unos márgenes elevados, fruto de la disciplina inversora en suelo de calidad para la posterior promoción de viviendas dirigidas al segmento medio alto”.

Aunque se sitúa por debajo de los últimos máximos, la cotización de Metrovacesa vuelve a colocarse en torno a los 7 euros, un precio un 40% de los niveles más bajos registrados en lo peor de la pandemia. A su favor juega contar con unas de las rentabilidades por dividendo más alta de toda la Bolsa española, en torno a los dos dígitos.

Neinor roza los 11,50 euros por acción, tras haber recuperado un 63% desde que perforó los 7 euros por acción en lo peor del confinamiento. “Además de la consecución de los objetivos de entregas en el negocio promotor, el desarrollo de su plataforma de alquiler residencial (BTR) puede suponer una fuente de valor oculto”, consideran en la entidad.

Estos expertos creen que las promotoras españolas seguirán subiendo en Bolsa. Con la compañía que se muestran más positivos es con Metrovacesa, a la que dan un potencial de subida del 44%, por encima del consenso (20,5%). En el caso de Neinor y Aedas sitúan los posibles avances en torno al 20%, en el primer caso en línea con lo esperado por la media de analistas (17%) y en el segundo, por debajo (30%).

¿Otra burbuja inmobiliaria?

Las perspectivas son positivas después de que el mercado de la vivienda cerrase 2021 con unas cifras que no se veían desde 2007. Según los datos del Consejo General del Notariado, en toda España se cerraron 676.775 compraventas, un 38,1% más que un año antes, con un incremento del precio del 5,3% a nivel anual, hasta quedarse en 1.507 euros por metro cuadrado.

Además de las compraventas, la formalización de préstamos para estas adquisiciones también vivió un año récord en 2021. Se firmaron 344.432 operaciones, un 35,7%, más que un año antes, con un incremento de la cuantía promedio de las hipotecas del 2,9%, hasta quedarse en 147.654 euros. Los bancos arriman “su sardina” al calor del inmobiliario y muchas entidades ya han comenzado a ofrecer hipotecas que en algunos casos llegan al 90% del valor del inmueble.

Con este panorama el BCE, en su Informe de Estabilidad Financiera del pasado noviembre, alertaba de que se están acumulando vulnerabilidades como consecuencia de las «valoraciones excesivas en algunos mercados de activos, los niveles elevados de deuda pública y privada y la mayor asunción de riesgos por parte de las entidades no bancarias». Más recientemente, Luis de Guindos, vicepresidente de la institución subrayaba hace unos días que la situación de sobrevaloración en ciertos mercados residenciales “está siendo cada vez más extendida y eso es una fuente de preocupación” para el organismo.

También ha puesto el foco sobre el sector el Banco de España. El regulador nacional cree que el mercado inmobiliario español no acumula, de momento, los riesgos que parecen estar generalizándose en los países de nuestro entorno debido a la laxitud de las condiciones de financiación «a escala global», pero aun así considera necesario mantener «una estrecha vigilancia».