“Tenemos que hacer historia ganando la Youth League”. Raúl ya ha enviado el mensaje y sus jugadores, todavía desde sus respectivos hogares, lo han recibido. El ‘7’ no sabe hacer otra cosa que no sea competir cuando está en un terreno de juego. Un ganador nato que los que mejor le conocen aseguran que no quiere perder ni los partidillos de entrenamiento. Le pasó en su etapa como jugador y le sucede ahora como entrenador.
Raúl no está por la labor de ir a Nyon de vacaciones, aunque la fecha, mediados de agosto, invite a ello. Quiere pasar a la historia del club también como entrenador, después de hacerlo como jugador, y quiere aprovechar la oportunidad de ganar por primera vez la UEFA Youth League, un título que todavía no ha conquistado la cantera madridista y donde la suerte le ha sido esquiva demasiadas veces. En un año raro, marcado por la crisis del coronavirus, el fútbol, al que tantas veces ha honrado vestido de blanco, le ha brindado una oportunidad inimaginable en el mes de marzo.
Para conseguirlo, Raúl ya ha comunicado a los jugadores con los que contará que ha mediados de julio tienen que presentarse en Valdebebas y, previo test del coronavirus, comenzar a preparar una competición que arrancará para el Real Madrid el 16 de agosto en un duelo que les enfrentará a la Juventus en los octavos de final. Los blancos tendrán por delante un mes para preparar el duelo ante los italianos. El reto se antoja complicado, ya que tendrán que luchar contra el calor que azotará a la capital de España en esos días y contra la inactividad de casi cuatro meses que han tenido los futbolistas. A pesar de que desde sus casas han seguido las indicaciones de los preparadores físicos, no es lo mismo.
Lo que todavía no tiene decidido Raúl y el club es si se van a concentrar en la residencia de la cantera en la Ciudad Real Madrid, donde sólo estarían ellos, o podrán ir a sus casas. En los próximos días se tomará esta decisión, pero lo que está claro es que el club apostará por la seguridad de sus jugadores.
¿Por qué Raúl?
Aunque en el Real Madrid sorprendió y no gustó que la UEFA apostase por finalizar la presente edición de la Youth League, una vez que se confirmó la noticia lo que tenían claro es que había que intentar ganarla, aunque la situación era muy compleja, ya que a la inactividad provocada por la pandemia se le unía la salida de Dani Poyatos, entrenador del Juvenil A que ha fichado por el Panathinaikos. Fue en ese momento cuando el club, liderado por Manu Fernández, nuevo director de fútbol comenzó a buscar una solución y las posibilidades no eran muchas.
Una era fichar un entrenador para el Juvenil A, algo que se hará en las próximas semanas, y que se hiciese cargo de un equipo que, en su gran mayoría, cuando empiece la próxima temporada jugará en el Castilla o saldrá del club. La otra era buscar a un hombre de la casa que estuviese dispuesto a asumir el reto. Tras unas reuniones que se llevaron a cabo el pasado fin de semana, la decisión fue apostar a Raúl.
El técnico del Castilla recogió el guante del club con ilusión y la única idea de ganar la competición. Problema solucionado. El Real Madrid ve en su figura la persona ideal para representar al club en una competición europea que cada temporada tiene más prestigio y, de paso, dirigirá en una competición internacional a un equipo que tiene jugadores a los que conoce perfectamente, ya que esta temporada han formado parte del primer filial, y el grueso formará el próximo curso la plantilla del Castilla.