El Real Madrid suma y sigue en la Liga Endesa. El líder destacado de la competición doméstica se impuso a uno de los gallos de la competición, el Unicaja (82-71), que trató de ponerle las cosas complicadas al vigente campeón, pero acabó sucumbiendo ante el fondo de armario exhibido por los de Pablo Laso, que tuvieron en Deck, Tavares y Llull a sus mejores hombres en la tarde del domingo.
Tavares fue uno de los destacados, después de un comienzo de temporada en el que no ha dado con la tecla para exhibir con continuidad el nivel al que había acostumbrado al madridismo. Con una tarjeta perfecta en el tiro –4/4 en tiros de campo y 2/2 en tiros libres–, el caboverdiano sumó también 10 rebotes para irse hasta los 24 de valoración, en una muestra que acumula optimismo en el madridismo de cara a próximos compromisos.
Deck, líder en los primeros minutos, y Llull, cada vez en mejor momento de cara al aro, fueron los otros nombres a destacar en un encuentro que ejerce como preludio de la esperada cita de Euroliga que medirá a Real Madrid y Barcelona este jueves en el Palacio, con Mirotic como invitado especial al duelo. Laso, siempre partido a partido, no pensó demasiado en lo que pudiera suceder en el Clásico y no realizó cambios especiales en su rotación, más allá de la alineación de Usman Garuba, esta vez desde el banquillo.
El joven interior tuvo un partido discreto, en el que no anotó y apenas capturó tres rebotes en su tarjeta estadística, pero volvió a demostrar su consolidación en la rotación del Real Madrid de los primeros meses de temporada. Con respecto a Unicaja, la desventaja acumulada en el primer cuarto fue una condena que no pudieron levantar a pesar de los 16 puntos de Adams y Carlos Suárez, en su regreso a la que fue su casa.