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Temor a la masiva presencia de aficionados culés en las gradas durante el Clásico liguero

Miedo a un Bernabéu culé

La derrota en el Clásico en Copa del Rey y la distancia entre Real Madrid y Barcelona en Copa hace que desde el club blanco piensen que el Bernabéu se llene de aficionados culés.

La derrota del Real Madrid ante el Barcelona en Copa del Rey ha disparado las alarmas dentro de la entidad madridista. Tras el contundente marcador del conjunto barcelonista, que se impuso por 0-3, desde el club temen un espaldarazo de la afición en el Clásico liguero del próximo sábado y que, a su vez, el Santiago Bernabéu se convierta en un lugar de peregrinaje culé. Desde el club piensan que se pueden repetir imágenes ya vistas en anteriores ocasiones, en las que el público festejaba los goles del conjunto azulgrana.

La distancia de ambos conjuntos en Liga hace que el interés que despierta el choque entre los dos grandes de nuestro fútbol para la hinchada local sea prácticamente nulo. Además, lo visto durante el transcurso de la vuelta de semifinales de Copa, donde el público empezó a abandonar el estadio casi en masa con el 0-3, no ayuda a generar buenas expectativas de cara al partido del sábado.

Como se lleva viendo a lo largo de la temporada, la afición está algo desencantada con el equipo. El Santiago Bernabéu ya no se llena para ver los partidos del conjunto blanco. Este curso, en muchas ocasiones, la asistencia ha superado por poco la mitad de la capacidad total. Frente al Barça se espera que la entrada no sea mala, aunque se teme que haya mucha más afluencia de público barcelonista de lo normal.

También, los clásicos acostumbran a ser partidos en los que la reventa de entradas alcanza grandes cotas. Al fin y al cabo, no deja de ser el mayor espectáculo futbolístico que se puede disfrutar en todo el mundo. Por ello, muchos abonados se ven ante una oportunidad de hacer negocio, vendiéndo su carné para el duelo. Si a eso le sumamos que el partido es de escasa transcendencia en lo que a los intereses madridistas supone, el número de aquellos que aprovechen su abono para sacarse un extra podría incrementarse.