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Copa del Rey: Atlético Baleares-Atlético de Madrid

Ingo Volckmann, presidente del Atlético Baleares: «Conocí el club porque me lo dijeron en una discoteca»

El mandamás del club balear, rival del Atlético en Copa, atiende a OKDIARIO antes del partido

Analiza el histórico duelo para la entidad insular y analiza la situación y viabilidad del club que preside

Al tercer tono, una voz con acento alemán contesta la llamada de OKDIARIO al otro lado del móvil. «Hola, te estaba esperando, que acabo de terminar de entrenar», afirma para dar la bienvenida. Puntualidad y orden, el abecé del ciudadano germano, aunque no parece Ingo Volckmann (Berlín, 1968) un alemán al uso. De primeras es cercano y bromista, aunque organizado y amante de España. Tiene lo mejor de los dos mundos. Desde hace más de una década preside el Atlético Baleares, club que este miércoles (19:00 horas) se enfrenta al Atlético de Madrid en Copa del Rey. «¿Un pronóstico? ganamos 1-0 sin ir a la prórroga.

«Si me llegan a decir hace 11 años  cuando empecé que íbamos a jugar contra el Atlético no me lo hubiera creído», reconoce durante su conversación con este medio. Ingo Volckmann conoció el club mientras se encontraba en una discoteca en Mallorca y se lo ofrecieron. Su idea cuando adquirió el bastón de mandos era invertir alrededor de 200.000 euros al año y ya va por 30 millones de euros. «Cuando lo cogí me dijeron ‘si lo aceptas te vas a calentar y vas a gastar más’ y tenían razón. Ya no puedo aguantar 1,5 millones de euros cada año. Estoy hablando con gente que pueda ayudar, pero el club va a seguir conmigo o sin mí», desvela.

Se trata de un presidente peculiar y temperamental a partes iguales. De esos que en partidos tensos son expulsados del palco por su visceralidad. «Hay situaciones que el árbitro pita algo que no he visto bien, me pongo nervioso y reacciono. No me dejan ni aplaudir, no soy un chico de palco. Los playoffs los veo con los aficionados en la grada porque ahí puedo ser yo». Una grada que lleva su nombre tal y como aprobó la afición. Ingo tiene otras filias como el boxeo. Le gusta practicarlo, presenciarlo y organiza eventos a través de su empresa Agon.

Pregunta. ¿Cómo llegó al Atlético Baleares?

Respuesta. Hace años. Tenía una discoteca y una noche me vino un trabajador mío y me preguntó si tenía interés en coger el club, así conocí al equipo porque la verdad que no sabía muy bien sobre ello, pero pensé ‘¿Por qué no voy a escuchar?’ Yo quería estar más dentro porque vivir aquí y no tener nada con la isla, ni negocio ni nada y estar con los alemanes… Eso no me gusta.

P. ¿Qué pasó al final?

R. Pues quería algo para ser conocido en Mallorca, así que escuché la oferta y lo hablé en supermercado a 40 grados al sol, me acuerdo bien, y todo fue bastante rápido. :e decidí por intentarlo. Mi padre tenía un club de fútbol en Alemania y siempre le decía que qué hacía con él y ahora mira.

P. ¿El club se lo ofreció una persona del club o externa?

R. No. Una chica que había trabajado para mí se lo dijo al jefe de sala y el jefe a mí. Un amigo mio hizo el contacto y hablé con ellos. Había una persona que conocía a alguien del Atlético Baleares, pero no recuerdo exactamente quien era.

P. Su inversión iba a ser de alrededor de 200.000 euros al año y ya va por 30 millones de euros. ¿Qué ha pasado?

R. Cuando lo cogí me dijeron ‘si lo aceptas te vas a calentar y vas a gastar más’ y tenían razón. Ha funcionado bastante bien y hemos estado cerca de subir a Segunda División entonces pones más y más. Hemos tenido cuatro playoffs y en esos momentos pensaba ‘vale, falta un toque’, voy a invertir un poco más’. Así ha pasado todo. También hemos hecho la reconstrucción del estadio que se encareció y llegó a los 10 millones de euros. Es mucho dinero. Después de 11 años me duele cada vez más. En Alemania los negocios no funcionan como antes y soy sincero, ahora me duele un poco más. Hay aficionados que critican la inversión y el resultado, que asuman ellos el club a ver cómo lo hacen.

P. Dice que después de 11 años ya le duele la inversión. ¿En qué situación económica está el club?

R. Como club está bien. Tenemos buenos jugadores, mira los fichajes que hemos hecho. Hemos gastado otra vez buen dinero. También tenemos algunos patrocinadores más. El trabajo, la verdad, es muy bien, pero cuesta mucho. Este es el problema. Después de 11 años ya me duele un poco más y estoy buscando a alguien que ayude porque no tenemos ninguna ayuda de nadie. Tenemos todos los sueldos al día, un buen equipo y lucharemos por el ascenso. Esa es la idea. Y encima tenemos la suerte de jugar contra un gran rival en la Copa del Rey.

P. ¿Ha pensado en vender el club?

R. Siempre estoy abierto, no puedo aguantar 1,5 millones de euros cada año, esa es la realidad. Estoy hablando con gente que posiblemente pueda ayudar, pero el club va a seguir conmigo o sin mí, esto está claro. No he hecho todo el trabajo para dejarlo en el pozo, pero soy realista y la gente entenderá que uno no siempre puede gastar. Todo viene de mí, de mi bolsillo y en Alemania los negocios han bajado. Estamos abiertos para escuchar cosas, pero que la gente del Baleares no se preocupe porque vamos a tener buenos años, pero ya estoy más abierta de escuchar cosas.

P. ¿Su familia que opina?

R. Le enseñé los números a mis hijos y me dijeron que estaba loco y tenía razón. Va n creciendo y yo quiero dejar mis negocios a ellos, entonces ven y entienden más los números. Me dicen que busque una solución.

P. Entre sus negocios está Agon, su empresa con la que organiza veladas de boxeo entre otros eventos. ¿Cómo lleva compatibilizarlo con la gestión del Atlético Baleares. 

R. Tengo gente, en el fútbol ya está bastante bien controlado porque la verdad es que lo hacen bastante bien. No tengo tanto trabajo en el club de fútbol, en el boxeo un poco más. Falta una persona que lo lleve, entonces hasta entonces yo lo llevo. Hemos tenido un combate con Canelo, con campeones del mundo y el año que viene será igual. Llevo 20 años haciendo kickboxing, me gusta, es un deporte muy limpio. También me gusta el fútbol, ambos deportes me encantan.

P. Hábleme del Atlético. ¿Cómo valora el partido de Copa?

R. Es un sueño. Si alguien me hubiera dicho cuando yo empecé hace 11 años que un día íbamos a jugar contra Atlético Madrid…. Los balearicos están muy contentos y yo también por enfrentarnos a un rival tan bonito y uno de los mejores de España.  Mira, hasta español, también español. Un nombre grande. Y hemos ganado contra español. Es algo grande en la historia de Baleares.

P. ¿Cuánto de optimista es para el partido?

R. En la Copa del Rey todo es posible, pero también soy realista. El día del partido es el cumpleaños de mi mujer en Múnich, así que cogeré un avión para llegar y ver el partido. Al día siguiente vuelvo a Múnich, pero no me podía perder este partido que es algo muy bonito y todo es posible. No sé cuantas veces en España ha ganado un club pequeño la Copa del Rey, en Alemania algunas veces. Todo es posible, pero soy realista y será muy difícil.

P. Por lo que dice parece que sueña con ganar la Copa del Rey. ¿Ve posibilidades?

R. Soy realista, pero nunca digas nunca. Si hacemos un buen partido contra el Atlético y pasamos… Nunca digas nunca. Me gustan las cosas difíciles que nadie o muy pocas personas han hecho. Por eso quiero subir a Segunda División con el Atlético Baleares. El objetivo es subir de categoría. Prefiero ascender que eliminar al Atlético. Pero también las dos cosas (ríe).

P. Será un día importante tanto deportiva como económicamente. 

R. Ha habido poco tiempo para organizar todo. La gente de la oficina ha trabajado más de 12 horas para organizarlo, estoy muy agradecido. las entradas se vendieron entre medio día y un día. Ahora Baleares lo conoce todo el mundo porque jugamos contra el Atlético. Económicamente es un plus que no teníamos previsto. Ayuda para fichar en invierno, lo podemos utilizar para hacer un esfuerzo para fichar y subir de categoría.