Gabi se va a entrenar al Zaragoza y el Atlético está encantado
El madrileño es uno de los futuribles junto a Fernando Torres para sustituir algún día a Simeone
El club seguirá muy de cerca su trayectoria en el primer equipo profesional que dirige
Su paso por el Getafe en Segunda Federación ha sido más que prometedor


Gabi entrenará a partir de mañana al Zaragoza, tras aceptar la oferta del club maño, en el que ya militó como jugador, y el Atlético está encantado porque le permitirá monitorizar la trayectoria del madrileño en el que será su primer equipo profesional. Gabi es, junto a Fernando Torres, una de las opciones «domésticas» que más gustan para cuando llegue el momento de sustituir a Diego Pablo Simeone
En el Atlético están convencidos de que Gabi Fernández, que en julio cumplirá 42 años, tiene un futuro esplendoroso en los banquillos porque reúne todas las condiciones para que así sea. Forjado junto a Simeone, dotado del más puro ADN rojiblanco, de cuya cantera surgió para debutar en el primer equipo en febrero de 2004, a los 20 años, su paso por el Getafe B, en Segunda Federación, ha sido muy prometedor, hasta el punto de que su nombre estaba en todas las quinielas como relevo de José Bordalás en cuanto éste abandonara el banquillo azulón.
Gabi ya había recibido hace meses una oferta del Zaragoza pero la declinó por su amistad con Ángel Torres, que le pidió que se quedara en el Getafe B, al que abandona en posiciones de play de ascenso. Ahora, sin embargo, ha decidido dar el paso adelante para dirigir a un equipo en el que militó como jugador por espacio de cuatro temporadas, de 2007 a 2011, momento en el que volvió al Atlético para iniciar allí un recorrido que se prolongó durante siete años, hasta 2018. Luego fichó por el club Qatarí del Al-Saad, donde jugó dos temporadas hasta poner fin a su carrera deportiva en 2020.
A partir de ahí Gabi inició su carrera como entrenador haciéndose cargo primero del juvenil del Getafe y después del equipo de Segunda Federación, al que tomó en noviembre de 2023 sustituyendo a Emilio Ferreras. Ahora adquiere una nueva responsabilidad y da un paso de gigante en su currículo asumiendo el banquillo de un Zaragoza con graves problemas deportivos, situado en la decimoctava posición, a un solo punto del descenso, y a falta de once jornadas para concluir la temporada.