El cambio de fecha lastra a Montmeló
Las nuevas fechas en las que se celebra el GP de Cataluña de MotoGP han impedido el crecimiento del trazado catalán, en un año en el que las cifras de asistencia a los circuitos están aumentando casi en cada carrera. Sin embargo, el cambio de junio a septiembre ha perjudicado a Montmeló que pese a todo logrará igualar los números del año pasado.
Se esperan unos 60.000 aficionados para el domingo, los mismos que vivieron en directo la prueba en 2022. Cuando salió el calendario, desde las oficinas del Circuit en Montmeló se temían lo peor ya que coincide con el final de las vacaciones de muchos aficionados al celebrarse la última semana de agosto y primeros días de septiembre. Por suerte, no será para tanto.
Barcelona logrará salvar los muebles y, aunque no podrá mejorar, conseguirán mantenerse en los números del año anterior. A diferencia del año pasado, esta vez sí que estará Marc Márquez. El piloto de Cervera no pudo correr el Gran Premio de casa puesto que se marchaba a Estados Unidos para operarse por cuarta vez de su lesión en el hombro. Esta vez sí que ha acudido, aunque no llega en un gran momento por desgracia.
Lo cierto es que a Montmeló le sigue costando volver a los números de antes de la pandemia. El cambio de fecha ha hecho mucho daño. Mientras otros trazados como Jerez, Le Mans o Sachsenring batieron récords, al Circuit le está costando remontar y se mantiene en los 60.000 por segundo año consecutivo. Desgraciadamente, habrá que esperar al 2024 para ver si este trazado tan histórico consigue remontar el vuelo y volver a enganchar al aficionado para disfrutar de un fin de semana de carreras en la Ciudad Condal.
En los últimos años, la audiencia de MotoGP y la asistencia a los circuitos había caído en picado coincidiendo con la retirada de Valentino Rossi y el bajo rendimiento de un Marc Márquez que no da con la tecla para volver arriba con Honda. Sin embargo, el cambio de formato introducido este año con las carreras al sprint parece que ha vuelto a enganchar a los seguidores del Mundial de Motociclismo tras unos años complicados. Por desgracia, a Montmeló, que antes del Covid-19 rondaba los 90.000 espectadores, le está costando recuperarse y han bajado hasta los 60.000.