Bautista estalla: «Esto es una cárcel con wifi»

Roberto Bautista es uno de los 72 tenistas que tendrá que pasar la cuarentena estricta en Melbourne después de que se diera algún positivo por COVID-19 en el avión en el que viajaron a Australia. El de Castellón ha definido su estancia en el hotel como «una cárcel con wifi», en declaraciones a un medio israelí. Posteriormente, ante la magnitud que han tomado sus palabras, el tenista ha ofrecido un comunicado pidiendo disculpas a «quien pueda haber ofendido».

«Esto es igual que una cárcel pero con wifi. La gente no tiene ni idea de tenis, sobre las pistas de entrenamiento… No tienen ni idea de nada. Es un completo desastre por eso, porque tienen el control de todo», se quejaba Roberto Baustista en una entrevista al canal de televisión Sport 5 de Israel sobre los protocolos impuestos por el gobierno de Victoria.

El tenista de Castellón es uno de los 72 tenistas obligados a pasar una cuarentena estricta durante dos semanas que les impide salir de sus habitaciones tras confirmarse varios casos positivos de coronavirus entre los pasajeros de los vuelos que les llevaron a Melbourne. Muchos se han quejado de desconocer que algo así podría pasar y es que la situación es bastante complicada ya que en tres semanas deberán competir en el primer Grand Slam de la temporada y en dos no podrán pisar una pista de tenis.

Bautista quitaba la responsabilidad de la situación a Tennis Australia y apuntaba al gobierno australiano.  «No es culpa de Tennis Australia, es culpa del Gobierno de Victoria. Puedes trabajar en la habitación pero no es lo mismo. Me siento muy restringido y no me puedo imaginar estar dos semanas así. Es muy duro y tendré que trabajar mucho mentalmente», comentaba Bautista, miembro del equipo español en la próxima ATP Cup 2021.

Pide disculpas a través de un comunicado

Las declaraciones de Roberto Bautista han aparecido en los medios de un gran número de países, tomando una magnitud que no esperaba el tenista de Castellón. Por ello, el número 13 de la ATP ha emitido un comunicado para pedir disculpas a quien pudiera haber ofendido y aclarar que había sido una conversación privada que después ha sido emitida, sin su conocimiento.

«Quiero pedir disculpas a todas las personas que se hayan sentido ofendidas por el vídeo que se ha publicado sobre mí recientemente. Se trata de una conversación privada sacada de contexto, que ha sido desafortunadamente difundida a los medios sin ser yo consciente ni contar con mi consentimiento», aclaraba Bautista.

Asimismo, ha querido agradecer  «a todas las personas que están haciendo que volver a competir sea posible. Así como a todas quienes luchan contra la Covid-19 a diario. Es admirable la gestión que se ha hecho en Australia para evitar la expansión», concluía Roberto Bautista.

Sigue la tensión entre los jugadores

Aunque algunos tenistas ya han tenido la oportunidad de pisar la pista, como Diego Schwartzmann, que ha compartido en redes alguno de sus entrenamientos con Stanislas Wawrinka, otros como Roberto Bautista siguen sin poder salir de sus habitaciones. Ello genera una gran desigualdad, ya que habá jugadores que llegarán al primer Grand Slam de la temporada sin haber podido entrenar apenas en las semanas previas al torneo.

La imposibilidad de entrenar ha sido una de las principales críticas por parte de los tenistas afectados, pero no ha sido la única ya que muchos también se han quejado de las comidas recibidas durante estos días en la habitación. Otros muchos se lo están tomando con cierta filosofía, intentando pasar el rato simulando entrenamientos en la propia habitación, como Pablo Cuevas, que está tirando de humor a través de sus Stories de Instagram.

Para tratar de mejorar la situación, Novak Djokovic pidió a Craig Tiley, máximo dirigente del tenis australiano, que se revisaran las condiciones y que todos los tenistas tuvieran la oportunidad de seguir entrenando. Sin embargo, la respuesta fue rotunda por parte de las autoridades australianas. «No hay un tratamiento especial aquí. Porque el virus no te trata especialmente. Así que nosotros tampoco», dijo el jefe del gobierno del estado de Victoria, Daniel Andrews.

Alcaraz, Badosa, los otros españoles afectados

Roberto Bautista no es el único tenista español que se ha visto obligado a pasar la cuarentena en Australia completamente aislado. También el joven tenista Carlos Alcaraz, que logró superar la fase previa para disputar su primer Grand Slam en Melbourne se ha visto afectado al darse un positivo en el vuelo que le llevaba de Doha a la ciudad australiana en la que se disputará el Abierto de Australia. El murciano y su entrenador, Juan Carlos Ferrero, permanecen aislados en sus habitaciones. Tampoco Paula Badosa puede salir de su habitación en las dos próximas semanas.

Quien sí ha podido pisar ya la pista ha sido Pablo Carreño. El asturiano eligió a Feliciano López como compañero de entrenamiento para la primera semana de cuarentena. Tras pasar varias pruebas de PCR con resultado negativo y después de ciertos retrasos -primero por problemas de transporte y después por la desinfección del hotel-, han podido, por fin, saltar a la pista para entrenar, como relataba el propio Carreño en sus redes sociales.