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Al 'Cucho' le caen cuatro partidos

Barra libre para Koeman: no es sancionado por su rajada sobre los árbitros tras el Clásico

El Comité de Competición ha sancionado al Cucho Hernández por criticar a los árbitros pero la rajada de Koeman en el Clásico ha quedado sin sanción porque creen que era una queja hacia el uso del VAR

El Comité de Competición no ha sancionado a Ronald Koeman tras sus palabras al acabar el Clásico frente al Real Madrid en el que perdieron por 1-3. El técnico holandés se quejó del funcionamiento del VAR y eso, desde competición, es lo que han tenido en cuenta para no imponerle una sanción al entrenador del Barcelona.

«Ojalá algún día alguien me explique cómo funciona el VAR en España», comenzó diciendo Ronald Koeman aquella aciaga tarde para los culés en la que perdieron frente al Real Madrid en el Camp Nou. «El VAR sólo ha entrado en contra del Barcelona, no hemos tenido ninguna decisión favorable», añadía el holandés. «Esta ha sido mi pregunta al árbitro al finalizar el encuentro: ‘¿Por qué van sólo en nuestra contra?’», terminó de explicar.

Tras esas palabras se le abrió un expediente, como también sucedió con Álvaro Cervera, técnico del Cádiz, pero que fue sancionado. Ahora, Competición ha decidido cerrar el ‘caso Koeman’ debido a que consideran que sus quejas iban dirigidas al uso del VAR y no a los árbitros directamente como sí hizo su homólogo en el cuadro gaditano o el Cucho Hernández, que ha recibido un castigo de cuatro partidos.

Y es que el delantero del Getafe se mostró muy enfadado tras perder por 0-1 frente al Granada con un gol de penalti. «Lo mínimo que tenía que haber hecho el VAR es decirle al árbitro que la revisara. Creo que es más culpa del VAR que del propio árbitro. Si hubiese ido, no habría pitado penalti», llegó a decir el delantero colombiano. De sus críticas la que peor parada sale también es la tecnología, pero le han caído cuatro partidos. Eso sí, al Cucho han podido pasarle factura las siguientes declaraciones: «El árbitro fue un poco irrespetuoso con nosotros, amenazándonos desde el primer minuto».