Hogueras de San Juan: ¿qué se debe echar al fuego?

Las hogueras de San Juan son una tradición muy antigua que se celebra en muchos lugares la noche del 23 de junio, coincidiendo con el nacimiento de San Juan Bautista. Sin embargo, su origen es pagano y se remonta a los cultos solares que se realizaban para festejar el solsticio de verano, el día más largo del año. El fuego simboliza la purificación, la protección, la regeneración y la fertilidad, y se cree que ahuyenta a los malos espíritus y atrae la buena suerte. Esta festividad ha sido adoptada y adaptada por diversas culturas a lo largo del tiempo, fusionando rituales cristianos y paganos, lo que ha enriquecido su significado y sus prácticas. En muchos lugares, la noche de San Juan se convierte en una ocasión para reuniones familiares y comunitarias, donde se encienden hogueras en las playas, creando un ambiente mágico. Las personas saltan sobre las llamas como un acto simbólico de renovación y purificación, y se cuentan historias sobre los poderes místicos del fuego y la noche, pero ¿sabemos qué se debe echar al fuego de las hogueras de San Juan?.

Son muchas las tradiciones al respecto, tanto en lo relacionado con lo esotérico y lo que tiene que ver con la buena suerte, como en el hecho de utilizar el fuego para «acabar» con algo del pasado ante la llegada de un nuevo verano. Algunas personas escriben deseos en pequeños papeles y los arrojan a las llamas, con la esperanza de que el fuego los eleve y los haga realidad. Otros queman objetos personales que representan malas experiencias o aspectos de sus vidas que desean dejar atrás, viendo en el fuego un agente de transformación y liberación. En algunas culturas, se cree que saltar sobre la hoguera tres, siete o nueve veces trae buena suerte y aleja las enfermedades. Además, en algunos lugares se confeccionan figuras de trapo o papel, conocidas como «juas» o «muñecos de San Juan», que representan lo negativo del año anterior y se queman como un acto de limpieza y renacimiento. Así, la noche de San Juan se convierte en una celebración de la luz, la esperanza y la renovación, uniendo a las comunidades en torno a un fuego purificador que invita a soñar con un futuro mejor, de modo que será importante saber cómo hacerlo y qué echarle.

¿Qué se debe echar a las hogueras de San Juan?

El 23 de junio se celebra la Noche de San Juan, que mucha gente considera como la más corta del año (aunque en realidad es la del solsticio de verano el 21 de junio), y una de las máximas tradiciones para esta noche es la de encender hogueras en las playas y en las verbenas que se dan en muchas ciudades. Hogueras que tienen un simbolismo pagano, al margen de que la celebración honre o venere a San Juan Bautista, pero ¿sabemos qué simbolizan? y sobre todo ¿Qué se tiene que quemar en ellas?

De alguna manera, la esencia de la noche de San Juan está en las hogueras. Los lugares de costa en nuestro país instalan hogueras en la playa donde quemar todo tipo de cosas y pasar la noche junto al fuego y el mar. Pero ¿qué exactamente? Según el lugar donde estemos celebrando la festividad de la noche de San Juan, podemos quemar una u otras cosas con distintos significados. Entre otras cosas podemos quemar:

• Madera, cartones y trastos viejos: Son los elementos más comunes y fáciles de conseguir para alimentar el fuego. Se dice que quemar cosas viejas o inservibles ayuda a liberarse de lo que ya no nos sirve y a renovarse para el nuevo ciclo que empieza. También se puede quemar papel con deseos escritos o con cosas negativas que queremos dejar atrás.
• Apuntes escolares: Es tradición que los estudiantes quemen sus apuntes en la hoguera de San Juan simbolizando el final del curso escolar.
• Muñecos o figuras: En algunos lugares se elaboran muñecos o figuras con materiales inflamables que representan personajes o situaciones indeseables. Por ejemplo, en Alicante se queman las famosas fallas de San Juan, que son monumentos artísticos de crítica social y humor. En Galicia se queman los meigallos, que son muñecos de trapo rellenos de paja que simbolizan a las brujas. Quemar estas figuras es una forma de burlarse o vengarse de lo que nos molesta o nos hace daño.
• Hierbas aromáticas: En algunas regiones se queman hierbas aromáticas como el romero, el tomillo, la lavanda o la salvia para perfumar el ambiente y aprovechar sus propiedades medicinales y mágicas. Se dice que estas hierbas purifican el aire, curan las enfermedades, protegen contra el mal de ojo y favorecen el amor.
• Sal: La sal es un elemento muy utilizado en la noche de San Juan por su poder limpiador y protector. Se puede echar sal al fuego para eliminar las energías negativas y crear un escudo contra las influencias malignas. También se puede echar sal al agua del mar o a un recipiente con agua para bañarse o lavarse la cara y el cabello, lo que se supone que trae salud y belleza.
• Flores: Las flores son otro elemento natural que se puede quemar en las hogueras de San Juan por su belleza y su simbolismo. Se pueden quemar flores de distintos colores según lo que se quiera atraer: rojas para el amor, amarillas para el dinero, blancas para la paz, etc. También se pueden hacer coronas o ramos de flores y lanzarlos al fuego como ofrenda o como deseo.

La tradición de saltar la hoguera de San Juan

Junto al hecho de quemar todos los elementos, mencionados, existe otro ritual que consiste en  saltar las hogueras para purificar la vida.

Este ritual se ha tomado desde tiempos pasados como una forma de ahuyentar a los malos espíritus. Según la tradición, para que esto se produzca, hay que saltar el fuego un número de veces impar.

Otro de los rituales más tradicionales, sobre todo en lugares de costa, es el de bañarse a las 0:00 horas cuando las hogueras ya se han encendido. Según las zonas, bañarse durante esta noche, o mojarse los pies, asegura buena salud durante el próximo año.

A este se puede añadir el saltar las olas de espaldas como símbolo para eliminar las energías negativas de todo el año.