Comunidad Valenciana
CRISIS DEL GOBIERNO VALENCIANO

El inestable Gobierno de Puig: de los 11 consejeros que iniciaron la legislatura con él sólo quedan 4

En apenas 3 años, el Gobierno Valenciano que preside el socialista Ximo Puig ha cambiado a 7 de los 11 consejeros -no se incluye al presidente- con que inició la legislatura y otro más ha cambiado de cartera. Sólo 3 de sus 11 consejeros continúan ocupando la responsabilidad con la que arrancaron la legislatura. En total, por el Gobierno de Puig, han pasado 18 consejeros desde el inicio de la legislatura 2019 hasta la fecha. Con todo, la salida más destacada fue en su momento la de la vicepresidenta primera Mónica Oltra, que dimitió tras resultar imputada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).

Precisamente, procedimientos judiciales, problemas de gestión o falta de apoyo de los partidos a alguno de esos consejeros han sido las razones de los cambios. El último, la sorprendente salida de la consejera de Agricultura Mireia Mollà (Compromís) fulminada por la actual vicepresidenta primera de ese Gobierno y sucesora de Mónica Oltra en el Ejecutivo Aitana Mas, también de Compromís, hace apenas 48 horas. Los cambios han sido tan notables que incluso hoy mismo han sido objeto de crítica por parte de la oposición en el Pleno deControl de las Cortes Valencianas.

Los cambios

El pasado junio, Aitana Mas relevó a Mónica Oltra como vicepresidenta primera y consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas tras la imputación de esta última por los supuestos delitos de prevaricación, abandono de menores y omisión del deber de perseguir delito en el caso que investiga si cargos y/o personal de su Consejería supuestamente ocultaron las denuncias de la menor abusada por el que era marido de la propia Oltra. 

Héctor Illueca (Podemos) relevó a Rubén Dalmau como vicepresidente segundo y consejero de Vivienda tras la dimisión de este último en agosto de 2021. Dalmau justificó su marcha por la necesidad de abrir una nueva etapa y regresó a la Universidad.

Vicent Soler, responsable de Hacienda y Modelo Económico, fue relevado por Arcadi España. Este último con una meteórica carrera. Fue jefe de Gabinete de Ximo Puig la pasada legislatura e inició la actual como consejero de Política Territorial. Está considerado el futuro sucesor de Ximo Puig dentro del Partido Socialista valenciano. Rebeca Torró, ahora cuestionada por el PP por 5 contratos covid por valor de 44,8 millones de euros fue quien relevó a Arcadi España como responsable de Política Territorial. 

Ana Barceló dejó la consejería de Sanidad Valenciana después de múltiples desencuentros con los médicos y enormes problemas. En su caso, pasó a ocupar la portavocía del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas, de donde a su vez salió Manuel Mata, que se marchó para centrarse en la defensa del principal imputado del caso Azud. Barceló es la candidata de Puig para la Alcaldía de Alicante.

Carolina Pascual, que era ministra de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital fue relevada, a su vez, por la alicantina Josefina Bueno. Carolina Pascual era decana del Colegio de Ingenieros de Telecomunicaciones a su llegada al Ejecutivo de Puig.

Vicent Marzà dimitió, sorprendentemente, en la crisis del Gobierno valenciano del pasado mayo. Sigue en las Cortes de la Autonomía. Fue relevado por Raquel Tamarit. Esta última, muy próxima a su vez a quién apunta a ser el líder de Compromís Joan Baldoví.

Mireia Mollà es la única de todos ellos que ha sido formalmente destituida a instancias de la vicepresidenta primera Aitana Mas. Su caso ha arrastrado 2 dimisiones, la del subsecretario de Agricultura y la de la secretaria autonómica. Su sustituta ha sido, a su vez, la secretaria autonómica de Salud Pública Isaura Navarro.

Los únicos que continúan en el Gobierno valenciano desde 2019 son la consejera de Justicia Gabriela Bravo, el mencionado Arcadi España, aunque ha cambiado de cartera, la consejera de Transparencia Rosa Pérez y el consejero de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo Rafael Climent.

Todos estos cambios han motivado que desde la oposición no sólo se critique al Ejecutivo de Puig, sino que crezca la petición de que la Autonomía necesita unas elecciones para contar con un Gobierno estable. Acusaciones que Puig ha tenido que rebatir esta misma mañana en las Cortes Valencianas.