Enero será testigo de una superluna de sangre

Lo cierto es que si decimos superluna de sangre, todo parece muy temible, casi como si esa noche no pudiéramos salir de casa por el riesgo a morir de forma violenta. Pero la verdad es que, si esto fue real siglos atrás, hoy en día es un fenómeno perfectamente explicado por la ciencia que no presenta riesgo alguno para nadie.

Y es que, antes de que la ciencia pudiera explicar un evento así, no debía ser fácil para el ser humano mirar hacia el cielo nocturno y observar la Luna más grande y más rojiza de lo habitual. De hecho, es un evento tan raro, que no es extraño que incorpore ciertas connotaciones algo fantásticas.

Además, en este caso, este fenómeno, que tendrá lugar el 21 de enero, marcará un doble fenómeno astronómico, ya que incluirá también un eclipse, algo realmente extraño, por lo que es importante recordar esta fecha para ver algo único y poco frecuente.

Dónde ver el eclipse de la superluna de sangre

Por desgracia, este eclipse que durará unas tres horas y media se verá perfectamente en América, pero no tanto en Europa occidental y África, donde tan solo se podrá observar con cierta claridad el inicio o puesta, pero luego se perderá, así que, para tenerlo en nuestro cielo, habría que mirar hacia arriba sobre las cuatro de la madrugada, hora española, ya que su clímax tendrá lugar a eso de las seis y cuarto.

Recordemos que esto que llamamos popularmente luna de sangre no es más que un fenómeno que se produce por la dispersión y refracción de la luz solar. Es decir, por medio de la luz solar que accede a la atmósfera terrestre, pasando a través de la sombra de este planeta, se produce un eclipse con tonos rosados y rojizos.

Recordemos que observar un eclipse lunar es relativamente común, pero que incluya superluna de sangre es muy infrecuente, de hecho, apenas podremos ver media docena como mucho durante toda una vida.

En este caso, la Tierra está en su perigeo, es decir, que la Luna está más cerca de nosotros que nunca en todo el año. Es decir, que si madrugas para ver este fenómeno, no solo observarás algo único, también serás partícipe de un espectáculo que ha levantado miles de mitos y leyendas a lo largo de la historia debido a ese resplandor rojizo que tanto nos recuerda a la sangre. Así que, madruga y marca en tu calendario el 21 de enero, merecerá la pena.