Castilla y León compra 6.000 bolsas para cadáveres aunque ahora tiene menos de 2.000 muertos oficiales

Una luctuosa adjudicación pública aparece este jueves en el portal de contratación del Estado: la Junta de Castilla y León, a través de su Consejería de Fomento, adquiere 6.000 bolsas herméticas para cadáveres destinadas a enfermos con el nuevo coronavirus covid 19. Su precio, 20.691 euros y el adjudicatario la pyme Industrias Plásticas del Pisuerga.

«Objeto del Contrato: COVID-19. Adquisición de 6.000 bolsas 900×2500 negro cierre inviolable», dice el contrato publicado este jueves, que llama la atención por la gran cuantía de bolsas que se reclaman. Hay que tener en cuenta que actualmente Castilla y León tiene de forma oficial tan sólo 1.930 fallecidos reconocidos por el Gobierno. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha aumentado esta cifra a 3.673 sumando confirmados (previo test) y sospechosos de covid 19.

Sin embargo, llama la atención el gran número de bolsas estancas que ha comprado a algo más de tres euros cada una, la Junta de Castilla y León. Por poner un ejemplo, hace tres semanas el estado de Sao Paulo (Brasil) ordenó la compra de 5.000 bolsas similares, tal y como referenció la prensa local. Se trata de un municipio con doce millones de personas mientras que Castilla y León no llega a los dos millones y medio.

«A largo plazo»

Desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León se asegura a OKDIARIO que «no sabemos lo que va a pasar porque esto está relajándose, pero el stock es a medio plazo. Se han pedido 6.000 bolsas para cadáveres por una previsión a medio-largo plazo porque son compras que si no se hacen ahora hay que hacerlas con el tiempo. Es un material que se compra a sugerencia de quien coordina la pandemia en Castilla y León y del Ministerio de Sanidad» de Salvador Illa.

Según dicen las fuentes oficiales: «Todo el material que se está comprando para tener stock, quitando los tests que no hay los suficientes. Los criterios no los establecemos nosotros, sino que los hace Sanidad de la Junta bajo la coordinación del Estado».

El Estado, por el momento, reconoce menos de 2.000 fallecidos en la región castellana y leonesa, donde ha habido una gran mortalidad en residencias de ancianos.