El Govern balear veta a los médicos que no saben catalán pero los intenta captar en Twitter en castellano
La campaña de captación en redes del Ejecutivo de Armengol no menciona el requisito de disponer de titulación de catalán
Hace dos semanas la Conselleria de Salud suprimió toda la cartelería en castellano en los centros de salud de las Islas
Les ofrece a los interesados estabilidad, promoción, contratos de larga duración y carrera profesional
La Conselleria de Salud del Govern balear que preside la socialista Francina Armengol, que veta a los médicos que no acrediten la titulación de dominio hablado y escrito de catalán, utiliza ahora el castellano en la red social Twitter para captar a facultativos de toda España con el fin de que vengan a trabajar a Baleares, una comunidad mermada por la falta de profesionales sanitarios.
La campaña puesta en marcha por la subdirectora de Humanización, Atención al Usuario y Formación del Servicio de Salud de las Islas Baleares, Rosa Duro, arrancó este pasado fin de semana aprovechando el reciente congreso de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) celebrado en el Palacio de Congresos de Palma.
Una oportunidad única dado que esta federación agrupa a casi 20.000 médicos de familia de toda España, a los que la alto cargo del Servicio Balear de Salud se dirigió en Twitter para intentar que vinieran a trabajar a las Islas.
Y lo hizo en castellano y sin mencionar en ningún momento el requisito ineludible y la exigencia del Govern de Armengol de que los médicos acrediten, a los dos años de estar trabajando en Baleares, el nivel B1 de catalán. Nada de ello figura en la publicidad de esta campaña en la que se insta a los médicos a dirigirse al servicio de recursos humanos de la Conselleria de Salud con un apremiante Ven a trabajar con nosotros.
Si estás en #PLMsemFYC y te está gustando Baleares ven a trabajar con nosotrxs 💪💪💪 necesitamos médicas y médicos de familia 🥰 escribe a [email protected] pic.twitter.com/VVvuFNtDUz
— Rosa Duro Robles (@rduror) October 8, 2021
«En las Islas Baleares necesitamos médicos de familia», apuntaba el mensaje en castellano de la alto cargo de la Conselleria de Salud que capitanea la socialista Patricia Gómez. Una consellera que hace escasos días dio la orden de retirar la cartelería en español de todos los centros de salud de las Islas.
Para demostrar el interés de la Conselleria de Salud por la Atención Primaria, en la publicación se resalta que el Govern destina un 23% de su presupuesto a la misma y les ofrece a los interesados en venir a Baleares «estabilidad y promoción,contratos de larga duración, carrera profesional y formación continuada».
La titulación de catalán impuesta por los socios nacionalistas de Més y aceptada por la presidenta socialista Francina Armengol afecta a todo el personal sanitario, incluyendo celadores, enfermeras, médicos y personal administrativo. Una realidad que ni se menciona en la propaganda de captación de médicos del Govern balear en Twitter, donde se pintan unas Islas Baleares, casi paradisíacas, con «calidad de vida y un clima excelente, no te lo pienses, ven a conocernos».
Para rematar la invitación al personal sanitario, el Govern remarca que cuenta con equipos multidisciplinares «con gran calidad humana, fomentando la comunicación entre distintos niveles asistenciales y trabajando en la eliminación de cargas burocráticas».
Hasta la fecha, se desconoce si la campaña de captación en las redes sociales puesta en marcha tras el citado congreso ha surtido efecto entre los médicos de familia porque la realidad de estos profesionales en las Islas es bien diferente a la que se dibuja desde la Conselleria de Salud.
De hecho, tal y como se expuso en ese mismo congreso de médicos de familia celebrado en Palma, estos profesionales tienen una ratio de población asignada en Baleares de 1.500 pacientes, muy por encima del techo máximo recomendable de 900 personas.