1×1: La gran tarde de Muriqi, la vuelta de Raíllo, las paradas de Sergio Rico

Vedat Muriqi fue la gran sorpresa del partido ante el Cádiz, pero en general el equipo estuvo a un gran tono. Sergio Rico hizo un par de paradas decisivas y Salva Sevilla impartió una lección magistral de fútbol en el centro del campo.

Sergio Rico: Volvió a demostrar que es un portero de garantías. El mejor ejemplo, la doble parada realizada al filo del descanso.

Maffeo: Otro día más en la oficina para el lateral catalán. Poco más que añadir. Jugadorazo.

Valjent: Era el hombre más feliz en el Visit Mallorca Stadium. La vuelta de su fiel compañero, el motivo. La dupla ya está aquí.

Raíllo: Es un animal. La vuelta del Káiser es una bendición. Tras casi seis meses sin competir, 90 minutos en sus botas. Capitán.

Oliván: Fue la gran sorpresa del 11 inicial y cumplió de forma notable. Provocó el penalty que dio lugar al tanto de Salva Sevilla. Alumno ejemplar.

Galarreta: Gran nivel el del centrocampista vasco. Sigue en línea ascendente. Se celebra.

Salva Sevilla: Es un lujo tener a un futbolista como el andaluz en la plantilla. Abrió la lata con un penalty magistralmente lanzado. No te retires nunca, Salva.

Kubo: “El Pacha” Espino soñará con el japonés. Gran encuentro del talentoso jugador cedido por el Real Madrid.

Dani Rodríguez: El despliegue físico que hizo el gallego es para ponerse en pie. Pundonor y garra a raudales. Titán.

Ángel: Tuvo una ocasión clarísima en el último minuto de la primera mitad, pero los palos repelieron su fantástico disparo. Mejora favorablemente.

Muriqi: Impresionante. Ha caído de pie. El atacante Kosovar dio un auténtico recital en su estreno liguero. La guinda, su gol. Imparable.

Banquillo:

Amath: El senagalés salió muy dubitativo al terreno de juego. Restó.0

Antonio Sánchez: Sumó músculo y pulmones para obtener un triunfo vital ante los gaditanos.

Battaglia: Ayudó con su fortaleza física a remar en los minutos finales.

Abdón: A pesar de que entró en el 89, tuvo el gol en sus botas. El palo volvió a escupir el latigazo del mallorquín.