El pueblo medieval que (casi) nadie conoce: su impresionante muralla medieval te sorprenderá

Montfalcó Murallat, una villa medieval en Lérida, es un ejemplo único en España donde el tiempo parece haberse detenido. Este pequeño pueblo, situado dentro de una fortaleza del siglo XIII, se mantiene fiel a sus orígenes, con sus 18 habitantes residiendo dentro de las antiguas murallas que datan del siglo XI. Las casas del pueblo, construidas en sillería, se encuentran adosadas a la muralla y conforman una única calle que desemboca en una plaza central con una cisterna y un horno comunitario. La conservación del patrimonio es evidente en cada rincón, desde su entrada por un arco de medio punto hasta su iglesia románica en honor a San Pedro.

Los alrededores de Montfalcó Murallat, como el pueblo de Olujas, también mantienen viva la historia con su castillo, que data del siglo XI, aunque con modificaciones que le dan apariencia de casa señorial. Toda la comarca de la Segarra ofrece una rica tradición gastronómica catalana, destacando productos locales como el aceite de oliva y embutidos. Este rincón medieval, escondido tras sus murallas, es un destino ideal para quienes buscan desconectar y sumergirse en la historia en un entorno lleno de encanto.

Montfalcó Murallat

@irenestravelling Pueblo medieval amurallado: es 📍 Montfalcó Murallat 🏘 Situado sobre una colina a 600 metros de altitud, con apenas 20 habitantes rodeado de una muralla de unos 8 metros de altura 🗺 Se encuentra a 1.15h aprox de Barcelona ¿Lo conocías? #pueblosmedievales #pueblosdeespaña #pueblosconencanto #llocsambencant #catalunya #catalunyaturisme #descobreixcatalunya #lleida #aralleida ♬ Give Me Everything (Stripped Down) – Archer Marsh

Montfalcó Murallat, una villa medieval situada en lo alto de una colina sobre el arroyo de Vergós y el río Sió, es un ejemplo excepcional de una villa cerrada. Rodeada por una muralla de ocho metros de altura y con una única puerta de acceso, la fortaleza fue construida en el siglo XI y era estratégicamente valiosa tanto para cristianos como sarracenos. El castillo de Montfalcó, mencionado por primera vez en 1043, pasó por diversas manos nobles, formando parte del condado de Cerdanya y más tarde del ducado de Cardona, hasta la abolición de los señoríos en el siglo XIX.

Una leyenda cuenta que, durante un asedio en la Edad Media, los defensores de Montfalcó burlaron a sus sitiadores utilizando un túnel secreto que conectaba con Olujas, permitiéndoles aprovisionarse. Los sitiadores, al ver que los defensores lanzaban mensajes desafiantes atados a pescados frescos, se desanimaron y levantaron el cerco, creyendo que los defensores no sufrían por falta de alimentos. Esta historia resalta la astucia y determinación de los habitantes de Montfalcó en tiempos de conflicto.

Lugares de interés

Accesible únicamente por el Portal Villa Closa, una doble puerta en el lado sur, la villa cuenta con una única plaza central desde la que parten dos calles: una hacia la iglesia de San Pedro, una construcción románica con transformaciones góticas y renacentistas, y la otra recorre el interior de la muralla, donde se encuentra un antiguo horno comunal.

Las casas robustas y adosadas a la muralla forman parte de la estructura defensiva original. Según una leyenda, la villa resistió un asedio medieval gracias a un túnel secreto que permitía el suministro de alimentos, lo que desmoralizó a los sitiadores. Esta historia realza la fortaleza del lugar, que durante siglos fue codiciada tanto por cristianos como por sarracenos.

Además, la zona alberga la Ruta de los Castillos del Sió, un itinerario histórico que recorre antiguos castillos de frontera construidos durante la Reconquista, atravesando paisajes de secano típicos de la comarca. En cuanto a la gastronomía, la Segarra destaca por sus parrilladas de carnes, cordero al horno, y platos de caza, complementados con postres tradicionales y el licor local, aromas de la Segarra, hecho con tomillo.

Olujas

A poco más de tres kilómetros de Montfalcó Murallat se encuentra Olujas, un municipio medieval en la comarca de la Segarra, Lérida, ubicado al noreste de Cervera, en el valle alto del río Sió. Su economía se basa en la agricultura de secano, con cultivos predominantes de cebada, trigo, olivos, almendros y viñedos. La ganadería, la avicultura y el turismo complementan sus actividades económicas.

El pueblo, situado en lo alto de una colina, conserva importantes vestigios históricos como el Castillo de la Oluja Alta, del siglo XI, que pertenecía al condado de Berga, y la Torre de defensa de Oluja. Entre los edificios religiosos destacan la iglesia barroca de la Asunción, del siglo XIII, y la capilla de San Salvador, del siglo XI.

Asimismo, la zona ofrece diversas rutas de senderismo, así como visitas gastronómicas y enológicas, que permiten disfrutar del paisaje y la rica tradición culinaria de la comarca.

En definitiva, la provincia de Lérida destaca por su rico patrimonio cultural. Además, entorno natural es ideal para deportes de aventura y nieve, así como para el turismo rural y ornitológico, complementado por una destacada gastronomía con productos de denominación de origen.