Parque de la naturaleza de Cabárceno: El arca de Noé de Cantabria

La naturaleza siempre ha generado curiosidad entre los seres humanos. La fauna de nuestro mundo es tan abundante que resulta imposible almacenarla toda en un mismo lugar y poder apreciar sus múltiples formas. Pero si lo que buscas es entrar en contacto con animales de todas partes del mundo lo mejor es que visites el Parque de la Naturaleza de Cabárceno. Un entorno perfectamente adaptado para cientos de especies animales que se sitúa en el corazón de Cantabria, allí donde el verdor es más intenso.

Leones, tigres, jirafas, elefantes… Cabárceno es capaz de condensar en un territorio de más de 750 hectáreas a todo tipo de especies animales. Unos seres vivos que se muestran a los visitantes en sus estado natural. Es decir, nada tiene que ver este parque con un zoo convencional, los animales, incluso los salvajes, pasean en semilibertad por el parque sin ningún tipo de reclusión. Cabe destacar que los grandes depredadores se encuentran apartados del resto para no generar problemas entre los visitantes. De igual forma, este es un parque diferente que se está convirtiendo en todo un reclamo para los turistas, una suerte de safari definido como «el arca de Noé de Cantabria» del que te comentamos sus rasgos más destacados.

Una ruta inolvidable

Para poder disfrutar del Parque de Cabárceno lo único que necesitas son dos cosas fundamentales: Un coche y ganas de vivir una aventura sin precedentes. El automóvil es fundamental para realizar la ruta por el parque en una travesía pavimentada al más puro estilo de los safaris africanos. En total, el trayecto recorre unos 20 kilómetros en los que poder avistar todo tipo de especies animales a tan solo unos metros de distancia. Unos seres vivos criados en semilibertad dentro de unos grandes recintos donde pueden vivir de forma similar a como lo harían en su entorno natural.

Otro de los aspectos fundamentales para poder moverte por este precioso entorno es el mapa. Un pequeño panfleto que te otorgarán a la entrada del parque y con el que poder observar los puntos clave del recinto y en el que vienen marcadas las horas de los diferentes espectáculos. Aunque si lo prefieres y tu espíritu pendenciero así lo exige, siempre puedes seguir las señales pintadas en el suelo para enfrascarte en una aventura en la que el coche se queda a un lado para poder observar de tú a tú a los animales en su hábitat natural.

Un sinfín de animales

Lo mejor para no perderse ninguno de los puntos fuertes del parque es seguir el mapa desde un principio, ya que sino puedes pasar por alto el primer enclave de Cabárceno. Hablamos del reptiliario, un lugar en el que conviven todo tipo de serpientes y lagartos en el que poder encontrar algunos de los organismos más venenosos del mundo. Unos animales que pueden observarse a través de grandes cristaleras y el el que existe habilitada una zona especial para los caimanes y cocodrilos.

Muy cerca del nido de reptiles podemos encontrarnos con el animal más grande de la naturaleza: el elefante. Dos ejemplares africanos que conviven en un terreno de 25 hectáreas y de los que se puede disfrutar más fácilmente en la zona de los cuidadores y veterinarios. Sin olvidarnos de la curiosa cercanía de la zona dedicada a los tigres. Unos animales que podrás ver como nunca, ya que yacen en libertad en un gran entorno separado de los visitantes a través de cristales y alambradas.

Otra de las paradas obligatorias tiene que ver con la casa de los gorilas. Un lugar donde poder apreciar con detenimiento el enorme parecido de estos animales con los seres humanos y en el que disfrutar de algunos de las crías de estos adorables simios. De los gorilas pasamos a los osos y la recomendación de verlos durante la hora de comer. La pelea entre los animales por conseguir el mejor botín es todo un espectáculo en el que la fuerza y la jerarquía están por encima de los rasgos físicos. Sin olvidarnos de uno de los puntos clave del parque: la zona de las jirafas. Un espectacular entorno en el que se permite poder dar de comer a unos gigantescos animales que impresionan por su altura y simpatía.

Espectáculos a todas horas

A escasos metros del reptiliario podrás disfrutar del show de los leones marinos. Un espectáculo en toda regla en el que los entrenadores animan a estos animales a demostrar sus habilidades con numeroso trucos. Eso sí, te aconsejamos llevar chubasquero por que estos simpáticos mamíferos tienen a mojar a los visitantes, sobre todo a los que están en primera fila.

En otro nivel se encuentra el famoso espectáculo de aves rapaces. Sin duda, una de las visitas obligadas del parque en la que buitres leonados, águilas calvas y águilas reales nos de deleitan con un show único en el mundo en el que los animales sobrevuelan muy cerca de nuestras cabezas.