Samsung arriesgó demasiado en el diseño de las baterías del Note 7
Samsung ha prometido que antes de final de año emitirá una conclusión oficial con respecto a la causa de las combustiones espontáneas que han hecho que tenga que retirar del mercado el Galaxy Note 7, el super teléfono que se esperaba fuese el protagonista de la marca coreana en esta campaña de Navidad. Sin embargo, mientras Samsung y los expertos independientes designados por las autoridades de consumo, examinan cuál de los múltiples factores implicados ha podido ser el causante de los problemas del Note 7, expertos de sitios web como Instrumental aseguran que la causa de las explosiones ha sido el que Samsung ha tratado de ir demasiado lejos en su diseño del terminal, tratando de empaquetar una batería de gran capacidad en un smartphone demasiado delgado. Según estos expertos, el problema de las baterías se encuentra en que Samsung ha apurado demasiado las tolerancias de los materiales de la propia batería en lo que tiene que ver con las capas que separan los elementos de las celdas de las baterías y en el aislamiento entre ellas.
Este diseño de las baterías, junto con el estrecho espacio en el propio terminal han podido causar que la presión de la carcasa o el aumento de ésta por cualquier circunstancia, como sentarse sobre el smartphone o un aumento de la temperatura ambiente, eran suficientes para que los electrodos de la batería entrasen en contacto con la consecuente combustión del terminal.
Así, los autores del estudio creen que Samsung sencillamente ha tratado de ser demasiado ambiciosa al exprimir las tolerancias de la batería. Con una batería que utilizase parámetros más estándar, Samsung podría haber evitado los problemas de sobrecalentamiento; pero esto habría supuesto reducir la capacidad de la batería con respecto al Note 5 e incluso con respecto a uno de sus grandes competidores, el iPhone 7 Plus, lo que quizá era también inadmisible para Samsung.