Análisis del iPhone 7, un mes después

A estas alturas, habrás leído y visto una ingente cantidad de información sobre los iPhone 7: desde descripciones, hasta análisis y pruebas que van desde comparativas de rendimiento hasta torturas como golpes, inmersiones o aplastamientos. En OK Tecnología hemos pasado algo más de un mes probando el iPhone 7 y a continuación te ofrecemos nuestras conclusiones y análisis del último súper teléfono de Apple, con una perspectiva menos efectista, pero que esperamos sea igual de valiosa a la hora de formar tu opinión con respecto a un smartphone que, para bien o para mal, es el que el mercado tiene como estándar de referencia de calidad para cualquier otro dispositivo.

Lo primero que debes saber del iPhone 7 es que no es exactamente una nueva generación del teléfono de Apple, a pesar de que le correspondería por el cambio de nombre y porque es el modelo que sale a la venta tras dos generaciones de iPhone 6. Con el iPhone 7, Apple ha dado una nueva evolución al iPhone 6s mejorando todas sus prestaciones, añadiendo alguna muy esperada como la resistencia al agua o retirando alguna como el polémico conector de auriculares; pero es básicamente una nueva evolución del concepto del iPhone 6. Los iPhone 7 y 7 Plus tienen los mismo tamaños, la misma forma y se sienten casi iguales que sus predecesores, tanto que si los llevas en una funda, nadie se dará cuenta de que llevas el último modelo y si has tenido el iPhone 6s, ni tú mismo notarás mucha diferencia en tu primer contacto con el móvil salvo en ocasiones al usar la cámara o si tienes un percance y se moja el dispositivo. Sin embargo, con un análisis más exhaustivo o cuando lleves unos días de uso sí vas a notar diferencias en el nuevo iPhone 7, casi todas positivas, y alguna pequeña espina.

Por fuera, más atractivo

Puedes quizá pensar que Apple no ha hecho un gran esfuerzo en cambiar el diseño del iPhone 6 y tienes mucha razón. Apple no ha querido cambiar el concepto ni la forma del iPhone 6s, pero el iPhone 7 ha revisado los dos detalles que más feo hacían al teléfono de la compañía: las franjas posteriores de las antenas van ahora mucho más disimuladas y en los modelos oscuros apenas se ven, y el módulo de cámara, aunque ahora es incluso más grande, va integrado en la forma de la carcasa de aluminio esculpido, haciendo que este elemento no dé una sensación de solución de última hora.

El acabado y construcción, como es habitual en Apple, es sencillamente impecable y la compañía sabe realmente conjugar la máxima finura en las terminaciones y a la vez dar esa sensación de robustez y durabilidad que no sueles encontrar en otros terminales. Si has tenido un iPhone de las últimas generaciones, sabrás que esto no es además sólo una sensación, ya que habrás comprobado que los teléfonos de Apple envejecen mucho mejor que la mayoría por esta construcción tan ajustada. En el caso del iPhone 7 se mantiene además la construcción en aluminio de clase 7000, el más resistente de la industria, lo que hace que la carcasa sea muy robusta. 

¿Negro brillante, demasiado delicado?

Como sabrás, uno de los cambios más llamativos en lo que se refiere al aspecto externo es la llegada de dos acabados en color negro. Uno de ellos, el negro mate, no tiene nada distinto a los acabados que ya conocíamos , aunque es como una pieza de metal negro ya que casi no se distingue el logotipo de la manzana y se han disimulado muy bien las franjas de las antenas. Sin embargo, el segundo iPhone en color negro, el acabado “jet black” o negro brillante es una historia completamente distinta. Es posible que no te haya llamado la atención este negro brillante o que, como nos ha pasado a muchos, te hayas enamorado a primera vista de este acabado que hace que el móvil luzca con el brillo de una motocicleta custom o como una pieza de cristal brillante.

Visto en directo, recién sacado de su caja y absolutamente limpio, sólo podemos decir que su aspecto es tan impresionante como en las fotos que puedes ver en el sitio web de Apple. Al tacto, la sensación es también excelente, sin que se escurra ni nada parecido. Sin embargo, al minuto de usarlo con las manos desnudas el acabado brillante se llena enseguida de huellas de tus dedos, por lo que deberás acostumbrarte a verlo mucho menos atractivo y a limpiarlo muy a menudo para disfrutar de su especial brillo. Además, como admite incluso Apple, este acabado es más propenso a reflejar el paso del tiempo y delicado en lo que se refiere a golpes y arañazo.

En cualquier caso, con todo lo bellos que son los iPhone 7, tienes que tener en cuenta que están fabricados en aluminio y aunque sea de la clase más resistente, es un material que si se da un golpe se puede deformar o abollar y se araña además con relativa facilidad, de manera que nuestra recomendación es que nada más hacerte con un iPhone 7 le busques una buena funda que lo proteja. Como sabes, tienes las propias de Apple en silicona o piel que son de las más atractivas y que mejor protegen al móvil, pero son ciertamente caras.

iPhone 7: resistente al agua por fin

En lo que se refiere al diseño y construcción, el iPhone 7 trae una novedad clave: la resistencia al agua. Hasta ahora, el iPhone 6s, aunque no era oficialmente resistente al agua, sabíamos que podía resistir un accidente fortuito en el agua. Sin embargo, en el nuevo modelo ya tienes certificación IP67 que significa que puedes sumergirlo en agua hasta más o menos un metro de profundidad durante una hora. Sin embargo, como habrás visto en Internet, parece que Apple ha sido muy conservadora con la certificación y el móvil resiste mucho mejor el agua y puede sumergirse hasta 10 metros sin sufrir daños.

Sin embargo, Apple ha puesto esta certificación porque, evidentemente, el iPhone no está hecho para que nades con él en la piscina o te duches mientras hablas sino que se ha hecho resistente por si tienes un pequeño accidente con agua en el baño o en la cocina, por si caes a una piscina o quieres hacer fotos al borde de ésta, si lo usas bajo la lluvia o se moja por cualquier razón. En cualquier caso, la resistencia al agua da una inusitada tranquilidad en muchas ocasiones y pone además al iPhone a la altura de otros teléfonos de gama alta como los Galaxy S7 de Samsung que tienen esta misma resistencia.

El famoso botón de home “sin botón” y el motor “háptico”

Uno de los elementos que introduce el nuevo iPhone 7 y que es uno de los principales culpables de la eliminación del conector de auriculares es el nuevo botón táctil de home. Este botón ya no es mecánico sino táctil para evitar posibles averías y hacer más fácilmente resistente al agua al iPhone. Por ello además, y para hacer que el tacto de la pulsación en este botón sea lo más natural posible, Apple ha integrado dentro del iPhone un nuevo motor háptico (el llamado taptic engine) que es capaz de crear impulsos que tus dedos reconocen como retroalimentación táctil. Esto es lo que normalmente hacen otros móviles con el motor de vibración que sirve para dar una mejor retroalimentación táctil al teclear o al realizar cualquier otra acción, pero llevada a un dimensión distinta.

El resultado de este sistema táctil del iPhone 7 es que al pulsar el botón tienen un sensación totalmente realista de estar pulsando un botón físico, aunque tienes la sensación de que todo el iPhone “se hunde” cuando haces clic, lo que a algunos usuarios puede despistar al principio. En nuestro caso, en unas pocas horas ya nos habíamos acostumbrado a esta nueva sensación. Para personalizar el efecto del clic, tienes un ajuste en el que puedes hacerlo más suave o más fuerte y además, el nuevo iPhone incluye retroalimentación táctil también al realizar otras acciones como al navegar por menús desplegables y esta se puede integrar en otras aplicaciones como juegos.

Así, a día de hoy, el botón táctil está ya muy conseguido, pero desde el punto de vista de usabilidad tampoco se puede decir que mejore sustancialmente el uso del iPhone (el iPhone 6s ya daba respuesta táctil, por ejemplo al pulsar fuerte en la pantalla para usar el sistema 3D Touch), aunque es posible que veamos como a poco se va sofisticando la respuesta táctil del sistema y, lo que es mejor, las aplicaciones de terceros. Por supuesto, como ya te puedes imaginar, este botón no funciona con guantes, salvo que estén tratados con alguna superficie capacitiva, aunque tampoco podrás desbloquear el lector de huella Touch ID.

Por último, en lo que respecta al lector de huella Touch ID, en nuestras pruebas hemos podido comprobar que es igual de rápido o más que el integrado en el iPhone 6s y además funciona mejor en situaciones en las que el lector del modelo anterior solía tener una respuesta algo errática, como cuando tienes las manos húmedas al hacer deporte. Otro detalle interesante es que la introducción de huellas en el sistema es muy rápida y fácil, lo que hace que no te dé pereza añadir tres o cuatro huellas para desbloquear el móvil con distintos dedos o, si lo deseas, añadir la huella de un familiar al que quieras dar acceso a tu iPhone, por ejemplo, de manera temporal.

Sin embargo, en su contra hay que decir que cuando no funciona, como por ejemplo cuando tienes los dedos muy húmedos, la introducción del PIN es algo engorrosa y parece más lenta en iOS 10 que en anteriores versiones del sistema.

Sonido: adiós a la conexión minijack, hola sonido estéreo

Como decíamos, uno de los elementos que han hecho posible integrar este botón con sensaciones táctiles es también uno de los responsables de que Apple haya tenido que retirar el conector de auriculares tradicional. Ante la disyuntiva de tener que eliminar el segundo altavoz (del que hablaremos enseguida), o no ser capaces de integrar el nuevo módulo de cámara más grande o este motor háptico, Apple ha decidido retirar el elemento que considera más prescindible: la conexión minijack. Así, los nuevos auriculares que se suministran con el terminal tienen conexión Lightning y se incluye también en la caja un adaptador para que uses otros auriculares convencionales.

La gran pega de esta eliminación es que es posible que como muchos de nosotros tengas una buena colección de auriculares con conexión minijack, algunos de mejor calidad para cuando quieres disfrutar de la música y otro más “de batalla” para cuando sólo quieres escuchar la radio, un podcast o cuando no quieres llevar por ahí y unos auriculares muy llamativos. Así, a partir de ahora, con el iPhone 7 tendrás que acordarte de ir colocando el adaptador de Lightning a minijack que muchas veces, como nos ha sucedido a nosotros, te dejas olvidado en “los otros auriculares”. Así, si eres de los que suele dejarse olvidados este tipo de accesorios, es recomendable adquirir un par de adaptadores extra (tienen un precio de 9 euros en la tienda de Apple).

El segundo engorro que vas a vivir con la eliminación del minijack es que no puedes cargar y escuchar tu iPhone al tiempo. Esto es a veces incómodo si tu hora de cargar el iPhone es la misma a que aprovechas para escuchar la radio o un podcast.

No obstante, para esta necesidad también están apareciendo adaptadores de muy diversa índole, aunque algunos a precios algo abusivos como el adaptador de Belkin que cuesta casi 40 euros y proporciona dos conectores Lightning para que puedas usar uno de carga a la vez que el otro para escuchar música (es de esperar que en un futuro no muy lejano se normalicen los precios de estos adaptadores cuando el iPhone no sea tanta novedad y haya una mayor oferta de ellos).

Mejor sonido al aire

Otra de las novedades que compensan la pérdida del conector minijack es que Apple ha podido integrar en el iPhone 7 un segundo altavoz en la parte superior y que sustituye al tradicional auricular. Este segundo altavoz hace que el iPhone 7 tenga sonido estéreo (lo que se percibe únicamente si usas el móvil en horizontal y más o menos cerca) y un mayor volumen y riqueza sonora al aire. en nuestras pruebas hemos podido comprobar que, efectivamente el sonido al aire es muy decente con un volumen elevado y sin distorsiones, pero la respuesta en graves sigue siendo limitada como es de esperar en un smartphone. En todo caso, puede servirte para tener mejor sonido cuando ves películas en YouTube o en servicios como Netflix o para dejar en casa los típicos altavoces compactos cuando viajas (eso siendo generosos, ya que los altavoces compactos de hoy en día pueden tener una sorprendente potencia y riqueza sonora). 

iPhone 7: pantalla más brillante

Seguramente, en un análisis “normal” de un smartphone, la pantalla habría sido el primer o segundo apartado que abordaríamos. Sin embargo, en el caso del iPhone 7 lo hemos dejado para más adelante ya que es un elemento que no ha cambiado de manera sustancial. El tamaño y resolución es el mismo que en la generación anterior y en el modelo de 4,7 pulgadas tienes una resolución de 1.334 x 750 píxeles con una densidad de 326 puntos por pulgada (el modelo de 5,5 pulgadas tiene resolución Full HD). El cambio más importante está en la luminosidad de la pantalla, que alcanza los 625 nits (Apple asegura que es un 25 por ciento más brillante que la del iPhone 6s) y la gama de color que se amplía para mostrar más tonalidades en colores críticos como los tonos rojos.

En nuestras pruebas, a simple vista, no vas a notar nada distinto en el iPhone 7, más allá de que la pantalla es sencillamente soberbia en nitidez, brillo y sobre todo en fidelidad de color (algo en lo que suelen fallar otros móviles).

En situaciones puntuales sí que puedes percibir mejoras, como en la visibilidad al sol, en la que el nuevo iPhone 7 consigue un brillo ligeramente superior y su cristal tiene todavía menos reflejos. Sin embargo, como decíamos, ni siquiera comparando con imágenes complicadas de resolver en lo que respecta al color y contraste hemos podido evidenciar una diferencia perceptible, más allá de lo mencionado en la visibilidad al sol y de un tono ligeramente más cálido en los blancos en el iPhone 7.

iPhone 7, la cámara por fin da un salto de calidad

Como seguramente sabrás, uno de los elementos que han mejorado sensiblemente en el iPhone 7 son las cámaras. Los nuevos iPhone tienen una cámara principal con mejor sensibilidad en condiciones de poca luz, una cámara frontal también mejorada de más resolución (ahora son 8 MP), y en los iPhone 7 Plus tienes una doble cámara principal con una doble óptica y sensor que te permiten elegir una distancia focal más larga para fotos de retratos o un mayor angular, así como hacer zoom con mejor calidad y hacer fotos con el fondo desenfocado ideales también para retratos.

En el caso del iPhone 7 de 4,7 pulgadas (con el que hemos convivido durante algo más de un mes) se puede afirmar rotundamente que la cámara es realmente más sensible y consigue mejores fotos en condiciones de luz escasa, con más tonalidades, menos ruido y más nitidez. Sin embargo, en condiciones de buena luz, no hay una diferencia muy fácil de discernir con respecto al iPhone 6s.

Es decir, en exteriores es probable que no notes mucho mejores las fotos del iPhone 7 con respecto a su predecesor (que ya tenía una cámara de gran calidad), pero en interiores, o al atardecer y por la noche, el iPhone 7 consigue unos resultados excepcionales acercándose o incluso a la par con el que a día de hoy puede considerarse el móvil que mejores fotos hace con poca luz, el Galaxy S7. Otro detalle que merece la pena mencionar es que el flash de la cámara principal cuenta ahora con 4 diodos LED de dos colores en lugar de los dos LED del iPhone 6s, lo que significa que tiene algo más de potencia para iluminar las escenas muy oscuras, aunque en estos casos, como decíamos, lo que más se nota realmente es la mejor sensibilidad del iPhone 7.

En la cámara frontal, las diferencias sí son más que perceptibles en cualquier situación y el módulo del nuevo iPhone 7 consigue una nitidez bastante superior y una ausencia de ruido y artefactos también muy superior y con poca luz, el “flash de pantalla” hace un trabajo más que digno para iluminar tus autorretratos.

¿Y qué hay de la doble cámara?

Como habrás leído ya, el iPhone 7 Plus tiene una segunda lente con una distancia focal equivalente a un 56 mm y un segundo sensor gemelo de 12 MP. Esta distancia focal es mucho más adecuada para retratos que el angular de 28 mm que tiene la cámara “normal” (que ha sido pensada para fotos de grupos, paisajes y demás) y puedes elegir una u otra según necesites. Además, esta cámara se supone ayuda a la de 28 mm a conseguir un zoom digital de mayor calidad y, sobre todo, permite crear efectos de gran apertura de diafragma para retratos con el fondo desenfocado como consiguen las cámaras réflex.

En definitiva, sobre las cámaras, se puede decir que Apple ha dado un paso importante en el nuevo iPhone 7 y es de hecho una de las características en las que más se percibe la diferencia en el día a día y, si el iPhone 6s era una delicia para hacer fotos, el nuevo modelo lo es todavía más y es que el móvil de Apple tiene esa rara cualidad de no sólo hacer buenas fotos sino hacerlas con mucha facilidad, de manera que apenas tienes que prestar atención para conseguir buenas instantáneas, algo que no es tan sencillo en otros móviles.

iPhone 7: rendimiento

Como seguramente sabes, el nuevo iPhone 7 incorpora el chipset A10 de 64 bits y cuatro núcleos propio de Apple y, como es probable que hayas visto, es el que mejores índices consigue en pruebas de rendimiento.

En nuestra pruebas con AnTuTu hemos alcanzado unos 170.000 puntos, una de las más elevadas del mercado y muy por encima de la mayoría de teléfonos Android con chipsets de Qualcomm o Samsung. Y más allá de que sea o no el móvil de mejor rendimiento del mercado, lo que podemos afirmar es que es un smartphone ciertamente incansable: el uso siempre es fluido y es capaz de mover con soltura programas muy exigentes o juegos con gráficos elaborados, así como grabar y reproducir películas 4K sin retardos ni saltos.

En todo caso, lo que no hemos percibido es un salto de velocidad con respecto al iPhone 6s que sigue siendo un móvil casi igual de potente y rápido.

iPhone 7: conclusión

Como cualquier otro súper gama alta, el iPhone es un smartphone muy caro. Sin embargo, en nuestra opinión, el nuevo modelo de Apple es el iPhone con menos fisuras y más sólido en prestaciones. Más allá de que te parezca muy importante el asunto del conector minijack o que tengas algún tipo de alergia con respecto a los productos de Apple, el iPhone 7 es uno de los mejores móviles del mercado y seguramente el de mejor valor en su conjunto. No tiene una gran pantalla en este modelo de 4,7 pulgadas y es verdad que el iPhone 7 Plus es quizá demasiado voluminoso para las 5,5 pulgadas de su panel. Sin embargo, como decimos, es en casi todas las facetas el mejor, o uno de los mejores, teléfonos del mercado. 

Por otro lado, ¿cuánto de mejor es con respecto a sus predecesores? Pues lo cierto es que si vienes de un iPhone 6s, las diferencias que vas a encontrar son muy marginales: la cámara es algo mejor, el sonido es mejor, tiene algo más de autonomía, es algo más rápido (esto no lo vas a notar en el día a día) y es resistente al agua (otra cosa que no sueles necesitar si tienes algo de cuidado). Por supuesto hay muchos detalles extra como la pantalla, el lector de huella, el botón táctil, etc., pero incluso si usas un iPhone 6, nuestra opinión es que no deberías tener una necesidad muy urgente de dar el salto al nuevo modelo. Si vienes de iPhones anteriores, entonces sí vas percibir que entras en un “nuevo mundo” en todos los sentidos (empezando por el tamaño de pantalla, claro).

Por último, seguro que algunos defensores de los teléfonos Android pueden estar rasgándose las vestiduras por estas afirmaciones. Es verdad que en plataforma Android tienes móviles muy interesantes por poco más de 200 euros, pero pensar que por un poco más hay teléfonos Android que superan al iPhone 7 es sencillamente no querer ver la realidad. Es verdad que los gama alta Android como los Galaxy S7 están muy a la altura del iPhone 7 y en algunos aspectos, como puede ser la cámara, incluso por encima; pero estamos hablando de móviles que tienen un precio muy similar al del iPhone 7.

Como decíamos al comienzo de la conclusión, si tienes “alergia” al iPhone porque piensas que su sistema es “cerrado” o porque no puedes usar una tarjeta micro SD, es posible que no estés ni siquiera leyendo este análisis y prefieras uno en el que se reafirmen los clásicos argumentos “anti Apple”, o sencillamente no quieras ni tener en cuenta los productos de una compañía que, por decisión propia, sólo compite en el segmento de móviles de gama alta. En relación calidad precio, está claro que el iPhone 7 no es el producto más sobresaliente y no es un móvil al alcance de todos los bolsillos, pero si tienes en cuenta cómo conservan los iPhone su valor (y lo rápido que lo pierden la mayoría de móviles Android), incluso con su precio tan elevado pueden ser una inversión más interesante que muchos otros smartphones más económicos.

Así, para finalizar, sólo podemos concluir que Apple ha conseguido el que es posiblemente el mejor iPhone de su historia (en términos relativos, claro, es evidente que el último debe ser el mejor) y aunque no estrena ninguna novedad extraordinaria, es el iPhone con menos pegas que hemos tenido nunca y de estética más pulida y atractiva desde el iPhone 6, y lo cierto es que los acabados como el negro pulido también le dan un nuevo interés a pesar de que el diseño sea tan continuista.