Helmfon, el genial y ridículo casco para aislarte en la oficina

Helmfon
El nuevo casco Helmfon te servirá para aislarte en la oficina, aunque no pasarás desapercibido

Una de las razones por las que vamos a trabajar a una oficina es poder tener una interacción directa con los compañeros y colaborar o discutir ideas. Sin embargo, en ocasiones, trabajar cerca de los compañeros es una desventaja a la hora de concentrarse en un trabajo más individual o tener una mayor privacidad a la hora, por ejemplo, de hablar por teléfono. Pues bien, para estas situaciones, la empresa ucraniana de diseño Hochu Rayu está desarrollando el Helmfon, una especie de casco abierto de gran tamaño que se coloca sobre los hombros y crea un espacio “privado” que te aísla del ruido exterior.

El aspecto como ves es algo chocante y casi ridículo, pero si trabajas en una oficina con mucho alboroto puede ser una genial alternativa a los habituales auriculares, que se usan en estas situaciones, o a tener que buscar un lugar tranquilo cada vez que quieres hacer una llamada.

Helmfon

El casco Helmfon de Hochu Rayu tiene una vertiente de aislamiento, pero puede ser además un periférico interesante ya que incluye un micrófono, altavoces, y una lupa por si necesitas realizar tareas de precisión. Además, incluye una zona especial para que coloques el smartphone y veas la pantalla para disfrutar de vídeos o hacer una llamada con más privacidad y aislado del del exterior.

Helmfon

El casco está fabricado con fibra de vidrio, espuma y una tela para recubrir el interior que consiguen que sea ligero y tenga el máximo aislamiento. Lo más habitual es que el casco Helmfon se sujete sencillamente sobre los hombros, pero el diseñador asegura que podría integrarse en una pared o incluso en la silla con un mecanismo para subirlo y bajarlo y convertir tu asiento de trabajo en una zona más aislada para concentrarte o incluso para descansar.

La empresa asegura que el producto está en fase de prototipo y ya hay empresas de Ucrania que están interesadas en instalar los Helmfon en sus oficinas. El principal problema es que, si no son cascos personales, los usuarios pueden tener reticencias sencillamente por una cuestión de higiene.

En cualquier caso, la idea es llamativa y cuando menos interesante, aunque la visión de llegar a una oficina y encontrar a los empleados como “extraterrestres cabezudos” con estos cascos se nos hace a día de hoy ridícula. Es posible que para cuando se haga habitual un producto así ya tengamos gafas de realidad virtual y auriculares más discretos que nos permitan aislarnos o trabajar de manera remota como si estuviésemos en la oficina, aunque si eso no nos parece extraño tampoco lo será ver a un compañero con uno de estos cascos Helmfon de aislamiento.

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