Sucesos
MUERTE EN TRASPINEDO

La acusación pide prisión provisional para Óscar por la muerte de Esther López en Traspinedo

El hombre estaba citado hoy en los juzgados de Valladolid para declarar como investigado no detenido

La representación legal de los padres y la hermana de Esther considera que hay un cúmulo de indicios que llevan a apuntar a la supuesta autoría de un homicidio

El cadáver de Esther López tenía pelo y fibras bajo las uñas y la autopsia no descarta que se cambiara de sitio

El amigo sospechoso de Esther López lavó varias veces y a conciencia su coche tras la desaparición

  • Alfonso Egea
  • Jefe de Investigación en OKDIARIO. Anteriormente fui responsable de la sección de Actualidad y Sucesos en Espejo Público, en Atresmedia. He publicado cuatro libros y actualmente colaboro en programas de televisión en Mediaset y en Telemadrid. Agradecido por tener el reconocimiento de la Policía Nacional de Madrid y la medalla al mérito de la Guardia Civil.

La última persona que estuvo con Esther López antes de morir y permanecer desaparecida durante 24 días, Óscar, se enfrenta por primera vez a la posibilidad real de entrar en prisión acusado de la ser el responsable de la muerte de la mujer de Traspinedo de 35 años, cuyo cadáver permaneció en paradero desconocido desde el 12 de enero hasta el 5 de febrero. Hoy, el abogado que representa a la familia de la víctima ha solicitado a la juez que instruye el caso que Óscar sea encerrado en la cárcel de manera provisional ante los indicios y contradicciones que lo colocan en el centro de las sospechas. La juez adelanta que no lo va a conceder.

Durante la jornada se esperaban dos importantes novedades en la causa: saber si Óscar iba a declarar sobre lo sucedido tras haberse quedado solo con Esther y qué iba a suceder con la única persona que hasta ahora ha sido detenida en esta investigación, Ramón alias El Manitas. Sobre este último el juzgado ya ha tomado una decisión: levantar todas las medidas cautelares que contra él había, incluso devolverle su pasaporte para que pueda abandonar libremente nuestro país. Esa decisión ratifica lo anunciado semanas atrás por este diario: Ramón ya no es sospechoso para los investigadores y esto es el reflejo de ese hecho en la causa judicial.

Ahora toda la atención va dirigida a Óscar, el principal sospechoso para los investigadores. Las sospechas sobre este hombre se basan en contradicciones y hechos falsos que él ha mantenido contra viento y marea ya sea hablando con amigos que haciéndolo con familiares de Esther López en incluso con los investigadores.

Indicios contra Óscar

Óscar asegura haber dejado a Esther sola en una carretera sobre las 3 de la mañana porque, según él, la chica se enfadó cuando le propuso seguir de marcha y él le dijo que a la mañana siguiente madrugaba para trabajar y que no podía, así que ella se bajó del coche y él se fue a dormir. Si sucedió así, ¿Cómo es posible que el teléfono de Esther estuviera en la casa de Óscar si nunca entró en esa casa según él?

Pero no de lejos es la única contradicción o indicio que ataca la presunción de inocencia de Óscar. Dos elementos complementarios son altamente sospechosos, uno de ellos el hallazgo de restos biológicos de Esther en el maletero de su coche, el mismo coche en cuyo habitáculo no se halló ni un solo vestigio de la joven. ¿Por qué? Porque Óscar, pese a negarlo, al día siguiente de los hechos lavó ese coche en un lavadero a 14 kilómetros del que usa habitualmente.

Lo que nadie en el caso entiende son otras maniobras protagonizadas por el investigado, quien aseguró haber dormido a pierna suelta la noche del 12 al 13 de enero, contradiciendo así a la aplicación de actividad física de su teléfono, que no sólo no registró ese periodo de descanso, sino una actividad inusual en las noches de Óscar hasta más allá de las 5 de madrugada.

Ni siquiera lo que hizo al día siguiente de la desaparición encuentra respaldo en sus dispositivos de localización. La Guardia Civil le preguntó expresamente a Óscar si alguna vez había activado, ojo, alguna vez en su vida, el modo ‘avión’ de su teléfono. Él dijo que nunca pese a que las horas siguientes la muerte de Esther lo hizo dos veces.

Mención aparte merece que este hombre les dijera a los investigadores del caso que la noche del 13 de enero, 24 horas después de la muerte de la joven, se fue a casa a dormir, en Valladolid, y no volvió a salir hasta el día siguiente. Su teléfono le da la razón, no se movió de su casa, pero quien se la quita es la centralita de su coche, que delata que estuvo dos horas fuera de Valladolid, en Traspinedo, donde murió Esther López.

Lo anterior sólo es un resumen de los indicios que recaen sobre Óscar y que lleva a la familia de Esther a pedir que vaya a prisión de manera provisional, algo que tiene ahora que decidir la juez, aunque ha adelantado que no va a hacerlo.