La experta en fisioterapia respiratoria explica que «la respiración por la boca u oral tiende a ser más superficial y menos eficiente en la filtración y humidificación del aire inhalado en comparación con la nasal».
De esta manera, la doctora de la Plaza añade que al realizar ejercicio, «es importante respirar por la nariz dado que ayuda a mantener una mayor concentración de óxido nítrico en el cuerpo, molécula de gas producida en la cavidad nasal y que actúa como potente vasodilatador mejorando el flujo sanguíneo y con él, la entrega de oxígeno y nutrientes a todos los tejidos incluidos los músculos».
«Luego, en deportes de fuerza como el levantamiento de pesas, por ejemplo, se recomienda tener un correcto control respiratorio entre los esfuerzos con el fin de estabilizar la columna lumbar y aumentar la concentración en cada uno de los ejercicios», subraya la doctora de la Plaza.
Por último, la experta defiende que aprender a respirar correctamente y utilizar técnicas respiratorias como el yoga, las respiraciones abdomino diafragmáticas o el método Wim Hof pueden impactar muy positivamente en la salud física además de producir relajación y bienestar.
Apenas del sueño
El síndrome de apnea durante el sueño, o síndrome de apnea hipopnea es un trastorno respiratorio que puede llegar a afectar a más del 5% de la población adulta. Una apnea es una pausa en la respiración de 10 o más segundos, y una hipopnea sería una pausa parcial.
Cuando una persona presenta ronquido intenso, apneas que interrumpen los ronquidos y somnolencia durante el día, se considera que padece de síndrome de apnea hipopnea obstructiva durante el sueño (SAHOS). Este síndrome va acompañado en muchas ocasiones de factores de riesgo cardiovasculares, como hipertensión, cardiopatías isquémicas (anginas o infartos) o accidentes cerebrovasculares.
El cansancio durante el día causa evidentes problemas sociales y laborales, e incluso podría ser factor desencadenante de un accidente de tráfico o laboral. Pero además se sabe que muchas muertes nocturnas inexplicables se relacionan con estas apneas. Este síndrome también causa cefaleas matutinas, y alteraciones en la memoria, la concentración e incluso en la libido.
Desde la Unidad del Sueño Dr. Estivill, en el Hospital Quirónsalud del Vallés, explican que se observa una clara predisposición genética en los pacientes que padecen el síndrome de apnea del sueño. Pero también identifican factores agravantes o que pueden influir en la aparición del proceso. Desde dificultades concretas para respirar, como sobrepeso o tabique desviado, hasta alteraciones neurológicas o metabólicas, pasando por alteraciones craneofaciales o esqueléticas, como una mandíbula inferior retraída o un cuello grueso y corto.
La apnea es un problema que en algunos casos puede llegar a ser potencialmente grave. Por ello, es importante hacer todo lo posible por prevenir su aparición y, en caso de no lograrlo, acudir al médico para que indique cuáles son los pasos a seguir para controlar dicho trastorno. El especialista hará todos los estudios necesarios para determinar la causa y tratamiento más adecuado para cada caso. Es posible prevenir la apnea del sueño mediante la adopción de prácticas y hábitos más saludables.