¿Cuáles son realmente los coches más caros de mantener?

Existe una creencia popular que indica que los coches de las marcas más reputadas del mercado son mucho más caros de mantener que los de las firmas generalistas. Pues bien, la OCU -Organización de Consumidores y Usuarios- se ha encargado de echar por tierra, en parte, esta creencia. Para ello se ha realizado un análisis de los costes de mantenimiento y reparación de los 28 coches más vendidos en España. Para ello se han tenido en cuenta diversas variables, como por ejemplo la oficialidad de los talleres en cuestión, las tarifas de la mano de obra o las horas necesarias para realizar ciertas intervenciones.

Después de analizar fríamente los datos, se llega a la conclusión de que el precio medio del total de las revisiones recomendadas durante los primeros 100.000 kilómetros de vida de los vehículos en España es de 978 euros cuando se trata de talleres oficiales. El tiempo que se emplea de media para una tarea de mantenimiento es de una hora y diez minutos, mientras que el coste medio de la mano de obra en este tipo de establecimientos es de 69 euros.

Si empezamos a hablar de marcas en concreto, sorprende que una como Dacia, que es el paradigma de los vehículos low-cost, sea de las más caras cuando visitamos el taller. ¿Por qué? Porque la construcción de sus vehículos obliga a que la estancia en el taller se prolongue por encima de la media. Se puede llegar a dar el caso que este tiempo incluso doble al de coches más caros.

Tampoco existe una relación directa entre el número de revisiones recomendadas y el coste total de las mismas. Por ejemplo, Ford recomienda hasta 5 revisiones en los primeros 100.000 kilómetros, no siendo sus coches ni de lejos los más caros de mantener. Mercedes se sitúa en el lado opuesto, con cuatro revisiones recomendadas y un coste bastante elevado.

Las reparaciones, otro caballo de batalla

Si hablamos de reparaciones, se han elegido tres de los elementos cuyo desgaste es el más común. Hablamos de pastillas de freno, amortiguadores y embrague. Lo más caro en estos casos son las piezas, aunque el tiempo empleado en sustituirlas varía bastante dependiendo del modelo.

Aquí las marcas ‘premium’ se llevan la palma, tal y como demuestra que una marca como Dacia reclama de media 236 euros por la sustitución de los amortiguadores en el caso del Sandero, mientras que la misma operación para un Mercedes Clase C asciende a 884 euros. La media de todos los modelos analizados es de 404 euros.

A pesar de que en ciertos casos es verdad que los coches ‘premium’ requieren un mayor desembolso de dinero durante su vida útil, las diferencias en algunos casos respecto a otros modelos de menor enjundia no son tan grandes como creemos. Conviene siempre tratar de informarse de estas cosas antes de comprar un coche, porque no siempre las leyendas urbanas son ciertas…