¿Cómo son los trastornos compulsivos en mascotas?

Los trastornos compulsivos en animales son condiciones en la salud más comunes de lo que creemos y pueden alterar su vida diaria. Se manifiestan mediante conductas que los animales realizan de manera repetitiva y sin motivo aparente. Si bien estos comportamientos suelen ser normales como acicalarse o rascarse; se puede determinar la presencia de este trastorno cuando esta acción se prolonga durante minutos u horas pudiendo llegar a dañar su salud.

Causas posibles de la presencia de trastornos compulsivos

Son muchos los animales que han pasado por experiencias traumáticas y son más propensos a que esta clase de trastornos aparezcan en algún momento de su vida. El maltrato o el abandono son algunos de los factores causantes de estas conductas repetitivas que suelen manifestarse de muchas y distintas maneras.

Los especialistas aseguran además que la causa de estos trastornos puede ser en algunos casos neurológica. Por ejemplo, es más susceptible de presentarse en animales que han demostrado tener epilepsia o ansiedad.

Si bien muchas personas pasan por alto estas conductas en sus mascotas, es sumamente importante visitar a un especialista, ya que en muchos casos el animal puede incluso auto mutilarse. Según indican los veterinarios, un animal presenta cuadros de trastornos compulsivos a partir del momento en que no puede ejercer control sobre sus emociones y termina expresándolo mediante conductas repetitivas.

¿Qué tipo de conductas compulsivas existen?

Conductas que afectan a la movilidad

Estas suelen encontrarse entre las más habituales. Se dan por ejemplo cuando el animal quiere atrapar su cola, realiza los mismos movimientos una y otra vez como excavar agujeros, dar vueltas sobre su propio cuerpo, perseguir el reflejo de la luz o permanecer quieto por mucho tiempo.

Conductas relacionadas con su boca

Morder o lamer son las principales maneras en las que se representa este tipo de patrón psicológico. Perros o gatos con trastornos compulsivos pueden estar mordiendo sus propias patas durante largos minutos o incluso horas, acicalarse o llegar a masticar objetos ajenos.

Conductas sonoras

Estas suelen estar relacionadas con abandonos o malos tratos recibidos desde pequeños, aunque en ocasiones las causas pueden ser otras. Dentro de este tipo de trastorno están los ladridos o aullidos incontrolables y sin motivo aparente. Así mismo, los gatos pueden maullar durante mucho tiempo sin parar.

Estas son solo algunas de las maneras en que se suele exteriorizar el trastorno compulsivo en animales. Si has notado un comportamiento similar en tu perro o gato es importante hacerlo tratar con un especialista; el profesional podrá determinar su causa y brindarle un tratamiento. Así evitarás que el animal termine lastimándose a sí mismo o a alguien más.