Investigación

Podemos destina 300.000 € al año para intimidar a sus rivales políticos en las redes sociales

Las redes sociales son el terreno en el que Podemos aspira a ganar la batalla ideológica. Y a veces lo consigue de una forma abrumadora, aunque para ello tenga que pagar un precio muy elevado: el partido de Pablo Iglesias gasta alrededor de 300.000 euros al año para tener presencia en las redes sociales.

Esta cifra incluye la gestión del canal Guerrilla de Telegram, que utiliza habitualmente para movilizar a cientos de trolls en Twitter y Facebook con el fin de imponer sus consignas, descalificar a sus rivales políticos e intimidar a los medios de comunicación que no comparten su línea ideológica.

Según su propio portal de transparencia, Podemos tiene actualmente en plantilla a 11 técnicos y coordinadores de redes sociales: seis de ellos en su organización nacional y el resto en distintas Comunidades autónomas (Baleares, Cataluña, Navarra, Extremadura y Canarias). En estos dos últimos casos, los responsables de redes compatibilizan su labor con la gestión del gabinete de prensa del partido a nivel autonómico.

Gasta 22.773 € al mes en redes

La mayor parte de ellos cobra un sueldo bruto de 1.891 euros al mes (lo que supone un coste real de 2.499 euros, tal como especifica a Podemos), salvo dos técnicos que trabajan a media jornada (con un sueldo bruto de 946 euros). Todo ello supone para el partido un coste de 22.773 euros al mes para garantizar su preponderancia en las redes sociales. Es decir, 273.276 euros al año, o un total de 318.822 euros al año si estos trabajadores cobran 14 pagas al año.

Entre esta plantilla se encuentra Guillermo Paños, que es el encargado de gestionar el canal Guerrilla en el servicio de mensajería Telegram con un sueldo bruto de 1.891 euros al mes. Así aparece identificado en el organigrama al que ha tenido acceso OKDIARIO, en el que la dirección de Podemos estableció el reparto de tareas entre sus principales responsables para la campaña de las elecciones generales del 20D.

En este organigrama del comité de campaña de Podemos, la dirección de los recursos de redes sociales está asignada a Eduardo Fernández Rubiño (que actualmente es el diputado más joven de la Asamblea de Madrid) y a la secretaria general del partido en el País Vasco, Nagua Alba.

Organigrama del comité de campaña de Podemos para las elecciones generales del 20D.

Y a continuación, como responsable de la «Guerrilla comunicativa», aparece identificado el técnico de redes sociales de Podemos Guillermo Paños. Como ha informado OKDIARIO, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, mintió el pasado mes de junio en La Sexta Noche, cuando aseguró que el canal Guerrilla «no tiene nada que ver con Podemos».

Su mentira queda acreditada con el organigrama que hoy publica OKDIARIO. Y también con el documento de «valoración de la campaña» electoral de su franquicia Cataluña sí que es pot en las elecciones catalanas del 27S.

El documento enumera las cuatro campañas que el canal Guerrilla, manejado por el técnico de redes de Podemos Guillermo Paños, desarrolló durante las semanas previas a las elecciones catalanas. Como ha informado este diario, una de las campañas se titula «Ataque a Ciudadanos (C’s)» y otra pretendía «usar el gancho del odio a Artur Mas» para identificar sus políticas con el PP y Ciudadanos.

La actividad del canal Guerrilla, en el informe de valoración de la campaña electoral de Catalunya sí que es pot.

«Usar el gancho del odio a Artur Mas» es una expresión que define bien la actividad del canal Guerrilla, ya que Podemos lo utiliza para movilizar en las redes sociales a sus miles de seguidores para hacer el juego sucio contra sus rivales políticos, fundamentalmente al PP, al PSOE y a Ciudadanos.

El hecho de que Podemos niegue su vinculación con el canal Guerrilla le permite mantener así un doble lenguaje: mientras Pablo Iglesias tiende la mano a Pedro Sánchez para gobernar juntos, Podemos agita las redes sociales con descalificaciones permanentes contra los principales dirigentes del PSOE.

Como ha informado este diario, Podemos no sólo usa Telegram para hacer juego sucio en las redes sociales. Sus principales dirigentes también utilizan este servicio de mensajería para teléfonos móviles para mantenerse en contacto a diario, puesto que goza de una reconocida fama de garantizar la confidencialidad de las comunicaciones. Aunque resulta muy difícil mantener esta confidencialidad cuando se utilizan grupos de Telegram en los que participan más de una docena de usuarios.

De este modo, OKDIARIO ha publicado durante los últimos días mensajes de los grupos de Podemos en Telegram en los que Pablo Iglesias presume de ser «un macho alfa», amenaza con «partirle la boca» a un individuo o dirige las siguientes palabras a la presentadora de televisión Mariló Montero: «La azotaría hasta que sangrase. Soy un marxista algo perverso convertido en psicópata».