El juez del ‘caso Dina’ citará de nuevo a Iglesias porque pudo mentir en su declaración

La versión que dio Pablo Iglesias en sede judicial, tras ser citado a declarar en el marco del ‘caso Villarejo’, han generado dudas entre los investigadores. Hay partes que no concuerdan con las pesquisas que se siguen en la Unidad de Asuntos Internos (UAI). Fuentes de la investigación aseguran a OKDIARIO que sospechan que el vicepresidente del Gobierno no dijo toda la verdad en su declaración ante el juez de la Audiencia Nacional.

Por esta razón, el magistrado Manuel García-Castellón y los fiscales Miguel Serrano e Ignacio Stampa se plantean volver a citar a declarar a Pablo Iglesias en la conocida como ‘pieza Dina’. Esta parte del sumario investiga el supuesto robo del móvil de la asistenta personal de Iglesias, Dina Bousselham, cuando el líder de Podemos era eurodiputado en Bruselas. Parte del contenido del móvil fue publicado en diversos medios de comunicación.

Fuentes judiciales aseguran a OKDIARIO que esta decisión se encuentra sobre la mesa, pero que no la adoptarán hasta que se produzca la comparecencia de Bousselham, que declarará previsiblemente dentro de más de una semana, como mínimo. De esta manera, la ex asesora de Iglesias «contará con suficiente tiempo para preparar su declaración» y matizar aquellos aspectos que pudieron contradecir la «versión ofrecida por el líder de Podemos», según indican fuentes de la investigación.

La que fuera asesora de Iglesias en el Parlamento Europeo deberá volver a la Audiencia Nacional, para aclarar algunos aspectos en el marco de la pieza separada número 10 del caso Tándem tal y como adelantó ABC. En esta pieza judicial se investiga cómo llegó a la redacción de Interviú la tarjeta de memoria SD del móvil sustraído a Dina Bousselham, en octubre de 2015.

El contenido de la tarjeta fue hallado entre el material requisado en el domicilio del comisario Villarejo tras su detención en noviembre de 2017. Según las investigaciones, la persona que entregó al ex agente de policía un pendrive con el contenido del móvil fue Alberto Pozas, ex director de Interviú y ex número 2 del Gabinete de Comunicación de Pedro Sánchez. Pozas iba acompañado por su número dos en la revista del Grupo Zeta, Luis Rendueles, tal como han reconocido ambos en su declaración ante el juez.

Iglesias mintió

El líder de Podemos en su interés por cargar contra OKDIARIO señaló ante el juez García-Castellón, en su declaración de marzo de 2019, que únicamente este periódico publicó el conocido informe PISA (acrónimo de Pablo Iglesias SA). Algo del todo falso ya que otros medios de comunicación como la Cadena Ser, El Mundo o eldiario.es también publicaron el documento de forma íntegra.

En enero de 2016, OKDIARIO publicó información sobre la financiación iraní de Podemos a través de las productoras de televisión de los programas de Iglesias. Al mismo tiempo otros medios se hicieron con ese informe y publicaron simultáneamente contenido que este medio no había revelado.

Iglesias mintió en su primera declaración ante el juez pese a que estaba obligado a decir la verdad tras ser citado en calidad de testigo cometiendo, de esta manera, un delito de falso testimonio en una causa judicial que está castigado con pena de hasta tres años de prisión y multa.

Dina hizo los pantallazos

Según el sumario, al que OKDIARIO ha tenido acceso, los investigadores aseguran que los pantallazos de las conversaciones de Telegram donde aparece el chat machista de Pablo Iglesias sobre la periodista Mariló Montero, fueron realizados por la propia Dina Bousselham. Después, Dina los envió a un tercero justo cuando se produjo esta conversación, en el año 2014, y no fue hasta dos años después, en 2016, cuando OKDIARIO desvela los insultos machista del líder de Podemos.

Un oficio del Grupo III de la Policía, fechado en marzo de 2019, confirma que no fue otra persona quien conservó estos mensajes. Fue la propia Dina Bousselham quien pulsó las teclas del móvil adecuadas para guardar una copia en forma de captura de pantalla de unos comentarios por los que Iglesias tuvo que pedir disculpas en público en el Senado y en sede judicial ante el magistrado Manuel García-Castellón.

No obstante, el estallido del escándalo Dina ocurrió semanas antes de las elecciones generales del 28 de abril y el uso que hizo Iglesias de la información judicial, que trasladó a su campaña política propició un mejor resultado en las urnas. Gracias a su victimismos -acusaba a las cloacas del Estado de haberlo perseguido- Iglesias logró frenar una sangría considerable de votos.