Internacional

El Papa Francisco evita leer un discurso ante los rabinos europeos: «No estoy bien de salud»

El Vaticano todavía no ha dado ningún detalle sobre el estado de salud del Papa

El Papa Francisco ha continuado con su agenda a pesar de informar de su mal estado de salud

En su discurso hace un llamamiento a la compasión, la justicia y el diálogo "en este tiempo de destrucción"

El Papa Francisco ha recibido esta mañana a los miembros de la Conferencia de rabinos europeos, pero ha afirmado, con voz cansada, que no está bien de salud, y que prefería no leer el discurso que tenía preparado para darles la bienvenida. A pesar de la rotundidad de las declaraciones sobre su estado de salud, el Papa no ha interrumpido las actividades de su agenda, sólo ha preferido no leer el discurso.

«Buenos días, os saludo a todos y os doy la bienvenida. Gracias por esta visita que tanto me gusta, pero sucede que no estoy bien de salud y por eso prefiero no leer el discurso sino dároslo y que vosotros lo llevéis», ha asegurado el Papa con voz cansada y algo ronca.

El Vaticano no ha hecho ninguna declaración sobre el estado de salud de Francisco, que ha continuado con su agenda, manteniendo así las numeras audiencias que tenía, y la celebración del encuentro con casi 7.000 niños de todo el mundo en el aula Pablo VI del Vaticano.

Compasión, justicia y diálogo

Aunque no ha leído el discurso que tenía preparado por encontrarse mal de salud, el Papa Francisco ha recibido esta mañana a los miembros de la Conferencia de Rabinos europeos. En el discurso afirma que ni las armas, ni el terrorismo, ni la guerra, sino la compasión, la justicia y el diálogo son los medios adecuados para construir la paz.

Francisco les entregó su discurso, en el que hizo mención a que «una vez más la violencia y la guerra han estallado en esa Tierra que, bendecida por el Todopoderoso, parece continuamente opuesta por la bajeza del odio y el ruido fatal de las armas». También ha mostrado su preocupación «por la proliferación de manifestaciones antisemitas» y ha expresado «firmemente» su condena.

El Papa señala que «en este tiempo de destrucción», «los creyentes estamos llamados, para todos y sobre todo, a construir la fraternidad y a abrir caminos de reconciliación» y afirma: «Ni las armas, ni el terrorismo, ni la guerra, sino la compasión, la justicia y el diálogo son los medios adecuados para construir la paz».

Por otra parte, el Papa abogó por el diálogo con el judaísmo. «Os necesitamos, queridos hermanos, necesitamos del judaísmo para comprendernos mejor a nosotros mismos. Por lo tanto, es importante que el diálogo judeo-cristiano mantenga viva la dimensión teológica mientras continúa abordando cuestiones sociales, culturales y políticas», aseveró.

Francisco instó a los rabinos y demás creyentes a «dar testimonio de su palabra con nuestro diálogo y de su paz con nuestra conducta»: «Que el Señor de la historia y de la vida nos dé valor y paciencia para hacerlo. ¡Salom!», concluyó.