Las tres condiciones que Rusia impone a Ucrania para detener la invasión
El Kremlin ha hecho públicas sus demandas para finalizar la invasión de Ucrania. Principalmente son tres: que Ucrania cambie su Constitución para garantizar que no se unirá a ningún «bloque», es decir, que no se pueda adherir a la OTAN o a la Unión Europea, que se reconozca a Crimea como parte de Rusia, y que se reconozcan a las regiones separatistas del este como independientes (la región del Donbás).
Estas habrían sido las condiciones que el Gobierno de Vladimir Putin habría presentado a Ucrania, según ha anunciado el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, justo antes de que se inicien las conversaciones de hoy entre Moscú y Kiev. Unas negociaciones que se están viendo bloqueadas por las altas exigencias rusas y la falta de acuerdo con Volodímir Zelenski.
Precisamente durante las últimas llamadas telefónicas entre el mandatario ruso y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, los rusos ya habrían dejado claro cuáles eran algunos de sus postulados que si se cumplieran haría que cesara la terrible y cruenta invasión en Ucrania que está dejando el peor éxodo de refugiados desde la II Guerra Mundial.
En esas conversaciones Putin le exigió a su homólogo francés el reconocimiento de Crimea como territorio ruso y la desmilitarización de Ucrania. El líder ruso volvió a insistir en que su objetivo es la «‘desnazificación’ del Estado ucraniano» y la promesa de que se aprueba un estatuto neutro para que Ucrania nunca llegue a pertenecer a la OTAN.
El presidente de Rusia no ve otra solución que haga que frene su intervención militar. Defiende que la resolución del conflicto «es sólo posible si los intereses de seguridad legítimos de Rusia son tomados en cuenta sin condición». «La parte rusa está abierta a negociaciones con representantes de Ucrania y espera que llevarán a los resultados esperados», aseguró la Presidencia rusa.