La filosofía de Sócrates aplicada a la educación contemporánea

• Francisco María
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• • 23/01/2025 13:03
  • Actualizado: 23/01/2025 13:03

Sócrates es uno de los filósofos más importantes de la antigua Grecia, cuyas enseñanzas han trascendido los siglos. El novedoso método de argumentación, basado en el diálogo que practicó con sus discípulos, no sólo revolucionó la enseñanza en aquella época, sino que también generó un gran impacto en la educación contemporánea. Las preguntas, diálogo y pensamiento crítico forman parte esencial de la pedagogía moderna, sobre todo, en la etapa universitaria.

A través del método socrático de indagación, los estudiantes universitarios son capaces de pensar de forma crítica para comprender en profundidad de la información enseñada y el proceso de investigación.

Los métodos de enseñanza de Sócrates

Sócrates desarrolló sus métodos de enseñanza con su grupo de discípulos, en quienes buscaba estimular el afloramiento de ideas con el fin de analizarlas y descubrir si eran valiosas. Para lograr dicho propósito, recurrió al diálogo, es decir, a un discurso breve de preguntas y respuestas entre dos, en su pequeño grupo de discípulos.

Para Sócrates, el diálogo como método de enseñanza debía cumplir con una serie de requisitos. En primer lugar, ha de utilizarse como una forma de razonamiento que debe centrarse en el acuerdo entre Sócrates y su interlocutor. Los acuerdos que surjan en el diálogo deben ser coherentes con los que se hayan alcanzado anteriormente y los que resulten incompatibles deben descartarse.

El método socrático se basa en la indagación y en la dialéctica para analizar y hallar la verdad, cuestiona todo lo que se conoce o se asimila, derriba las pretensiones de certeza y busca detalles para llegar a un entendimiento general o a una comprensión más profunda de un tema en específico.

A pesar de que no se conservan textos escritos por Sócrates, debido a su decisión deliberada de preferir la palabra hablada sobre la escritura, sus discípulos escribieron amplios relatos de memorias de las clases. Platón, quien fue uno de sus alumnos más famosos, se vio muy influido por sus enseñanzas y gran parte de sus diálogos con Sócrates muestran la dinámica dialéctica y reflexiva del método socrático.

La influencia de Sócrates en el área universitaria

El trabajo y la filosofía de Sócrates ha sido tan importante que actualmente forma parte esencial de la educación universitaria. Esta influencia se puede observar en muchos estudios, investigaciones y ensayos inspirados en Sócrates, los cuales giran en torno al Método socrático.

El método de Sócrates es una poderosa herramienta de aprendizaje muy útil en la etapa universitaria porque el profesor puede utilizar el diálogo y hacer una serie de preguntas al estudiante para guiarlo y ayudarle a pensar críticamente sobre un tema. De esta manera, se alentarían a los estudiantes a formular sus propias las conclusiones aplicando la filosofía principal de Sócrates: “El conocimiento no se enseña, se descubre”.

Al recurrir a este método en la educación contemporánea, los alumnos desarrollarán la capacidad de aprender a pensar y discernir por sí mismos, lo que a su vez les permitirá formarse como ciudadanos pensantes, críticos y empáticos, en lugar de formarse como futuros empleados con un nivel de obediencia propia de un rebaño.

Cabe señalar que las universidades actuales se han convertido en espacios para escuchar y absorber información, donde apenas se deja lugar para la deliberación, el escrutinio y la resolución de problemas. Esto lleva a que los estudiantes y profesores se sientan cansados y desanimados y genera niveles mínimos de desempeño evaluable. Por esta razón, no se trata de centrarse en la enseñanza dirigida sino en el aprendizaje adquirido.

La importancia de las humanidades en la educación

Sócrates tenía un mayor interés por el ámbito de las humanidades y las cuestiones políticas y morales, sobre la ciencia. Esto demostraba, de alguna manera, la importancia del estudio crítico de las artes y la filosofía, dado que estas tienen la función de desarrollar habilidades cognitivas, sensitivas, imaginativas e intelectivas que son básicas para los seres humanos en cuanto a entes sociales.

El aprendizaje de lenguas, historia, filosofía y ciencias políticas, de la mano con el método socrático, son imprescindibles en la educación contemporánea, sobre todo si se busca que los países se desarrollen adecuadamente en su ámbito social. En cuanto a los ámbitos emocional y cognitivo, el estudio de las artes es fundamental, pues cultivan la capacidad de juego y empatía y a su vez se enfocan en las carencias específicas de cada cultura.

La humildad intelectual

Sócrates era conocido por su famosa afirmación «Solo sé que no sé nada», que refleja una profunda humildad intelectual. Esta actitud es fundamental en el contexto educativo actual, donde los educadores y estudiantes deben reconocer que el aprendizaje es un proceso continuo. Fomentar un ambiente donde se valore la curiosidad y la disposición a aprender de los errores contribuirá a crear una cultura educativa más inclusiva y dinámica.

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