Sílvia Orriols, el nuevo independentismo que inquieta a Junts y ERC: «No es inmigración, es invasión»

• Rafael Molina @RafaelMolinaTW
• Redactor de Nacional en OkDiario con formación en Periodismo y Derecho. Te leo en rafael.molina@okdiario.com
• • 15/04/2024 06:45
  • Actualizado: 21/05/2024 10:11

El fenómeno político independentista de los próximos comicios en Cataluña no vive en Bélgica. Tampoco está en la capital de la región, en Barcelona. El terremoto electoral que puede arañar votos a ERC y Junts es alcaldesa de un pueblo de apenas 10.000 habitantes en Gerona, de Ripoll. Se llama Sílvia Orriols y defiende el discurso más duro contra la inmigración masiva ilegal. «No se llama inmigración, se llama invasión», espeta Orriols en sus redes sociales.

Sílvia Orriols se opone a la inmigración ilegal de forma directa y sin complejos. Y con el mismo fervor defiende también la independencia de Cataluña. La alcaldesa de Ripoll se presentará a las elecciones catalanas del próximo 12 de mayo y el vídeo en el que anuncia su candidatura alcanza casi un millón de visualizaciones en apenas 24 horas, a pesar de carecer de grandes medios de grabación y de efectos especiales. La política de Aliança Catalana hace encender las alarmas a la derecha tradicional independentista, a quien puede quitarle votos de cara a los próximos comicios.

Ideario expuesto en redes

Sílvia Orriols ha dibujado su perfil ideológico a través de sus redes sociales. Allí ha planteado la idea de que Cataluña controle sus propias fronteras y que frene la inmigración ilegal. La llegada ilícita de extranjeros, en opinión de la alcaldesa, «degrada los servicios públicos, dispara la inseguridad y provoca fracaso escolar y retraso educativo en las aulas». «No puede ser que cada trimestre lleguen niños que no hablan catalán ni tienen conocimientos mínimos», expresaba en su perfil oficial.

La líder de Aliança Catalana fue más allá y expresó que había un «vínculo inequívoco que existe entre inmigración y delincuencia». «No se llama inmigración, se llama invasión», espetaba en su cuenta la política catalana.

«Prácticas primitivas y misóginas se extienden impunemente a nuestro país. La inmigración masiva e invasiva proveniente de culturas (o inculturas) subdesarrolladas nos aboca a la tercermundización y a la barbarie», criticaba la líder de Aliança Catalana.

Junts toma nota

Junts ha ido asumiendo algunos de los postulados de formaciones que se mueven más a su derecha en el espectro ideológico. Entre otros, los de Puigdemont exigieron al Gobierno de España el control de fronteras como contraprestación al apoyo de varios decretos ley. Un movimiento para recabar los votos de electores que simpatizan con partidos como Aliança Catalana.

La aparición de Orriols en los comicios autonómicos enciende las alarmas de la derecha tradicional. Desde Junts temen que esta formación pueda restarle votos de los electores más críticos con la inmigración o con el rumbo del independentismo. Un terremoto que puede opacar la vuelta de Puigdemont a España.

Ahora el siguiente paso para Aliança Catalana es conseguir los avales necesarios para poder presentarse a las elecciones del 12 de mayo. El partido necesita la firma de un 0,1% de los electores para poder presentarse a los comicios autonómicos y ya ha comenzado a recogerlas en varias ciudades de la región.

Una desconocida en España

Para la política nacional, Orriols es prácticamente una desconocida. Ahora es la alcaldesa de Ripoll, un municipio gerundense de 10.000 habitantes, y se ha presentado a las elecciones con un discurso en el que llama a «restituir el Estado catalán, recuperar todas las competencias y ejercer el control fronterizo».

Después de aquella primera aventura, permaneció en un segundo plano político. Aun así, se manifestó desde 2012 y hasta 2018 fervientemente en favor de la independencia y en contra de la sentencia del Supremo que condenaba a los líderes del procés, formando parte de un colectivo con el nombre de L’Intransigent de Catalunya.

En uno de esos actos, en la Diada del 11 de septiembre de 2017, defendía la independencia de Cataluña con firmeza: «Aunque sea la última cosa que haremos y a lo mejor tendremos que morir para conseguirla». «Te arrancaremos de la cima de nuestra patria», dijo en alusión a España en ese vídeo en el que también señalaba que era «la hora, ahora o nunca»

En una de las pocas entrevistas que ha concedido la política independentista, expresó que su creencia cristiana se volvió más sólida después de pedir una intercesión religiosa para poder tener hijos. Ahora tiene una familia numerosa, con 5 vástagos.

El primer paso que le permitió ocupar un cargo público llegó en 2019. Entonces, la ahora alcaldesa de Ripoll se afilió al Front Nacional de Catalunya (FNC), un partido independentista y contra la inmigración. Con FNC se presentó por primera vez a unas elecciones municipales y consiguió un asiento.

Sin embargo, el carácter antiinmigración, identitario, independentista y en favor de la unilateralidad de FNC no eran suficientes para Orriols. La concejala de Ripoll defendió marcharse en 2020 del Front por «el miedo y los complejos de la actual directiva del partido a la hora de afrontar la grave crisis nacional y el problema de la inmigración». Apenas unos meses después de los comicios, abandonó el partido y creó otra formación, Aliança Catalana (AC).

«Deportación inmediata»

El programa electoral de Aliança Catalana se centra en cuatro aspectos fundamentales: independentismo, industrialización, antiinmigración y valores catalanes. A pesar de que las líneas generales del partido se enuncian en su página oficial, como Sílvia Orriols, utiliza las redes sociales para ahondar en sus postulados.

Aliança Catalana explicitaba en su perfil oficial que «mientras Cataluña no tenga el control sobre sus fronteras, se expone a peligros como el terrorismo islamista y la inmigración ilegal». Por su parte, creen que «en un mundo globalizado e interconectado no podemos permanecer abiertos ni a todo ni a todo el mundo». El partido de Ripoll opta por «deportación inmediata» como solución a la llegada masiva de inmigrantes.