España
Bronca Vox-Podemos

Abascal usa una foto de un atentado de ETA para acusar a Iglesias de ser «un peligro para España»

Santiago Abascal, líder de Vox, ha usado una foto del atentado de la banda terrorista ETA que perpetró en Vich (Barcelona) en 1991 para acusar a Pablo Iglesias, vicepresidente segundo del Gobierno, de ser «un peligro para España y para la Libertad». Lo ha hecho a través de un tuit en el que ha recordado el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil en esta localidad hace 29 años.

«Hoy se cumplen 29 años del atentado contra la casa cuartel de Vich. ETA asesinó a diez personas, cinco niños. 200 kg de explosivo. Años después, el ahora vicepresidente alabó la ‘perspicacia’ de la banda terrorista ETA. Iglesias es un peligro para España y para la Libertad», ha afirmado Abascal a través de un mensaje colgado en su perfil de Twitter. En la icónica imagen de aquella tragedia se puede apreciar a un guardia civil con una niña ensangrentada en brazos huyendo del lugar del terrible ataque.

Santiago Abascal hace referencia a unas palabras pronunciadas por Iglesias años después en una ‘herriko taberna’ señalando que «la izquierda vasca y ETA» fueron quienes se dieron cuenta de que la Constitución «mantiene poderes que permitieron que ciertas élites económicas y políticas se mantuvieran en principales mecanismos de poder del Estado español».

«Es un peligro para la democracia»

Santiago Abascal ha elevado el tono de la denuncia del guerracivilismo de Pablo Iglesias en las últimas horas. Este jueves, durante un encuentro vía telemática en ‘Cañas por España’, un encuentro con los jóvenes del partido que se hacía de forma presencial antes de la pandemia, aseguró que «Podemos se está convirtiendo en un peligro para la democracia». El líder de la formación conservadora señaló también que «el guerracivilismo de Iglesias no logrará dividir a los españoles».

En el mismo encuentro, Abascal afirmó que Pablo Iglesias hace «apelaciones directas a la Guerra Civil desde la tribuna del Congreso», en referencia a las palabras del vicepresidente podemita de este jueves en la llamada Comisión de Reconstrucción Económica y Social en el Congreso de los Diputados.

«Quieren dar un golpe de Estado»

Este jueves, Pablo Iglesias mostró su actitud más macarra al acusar a Vox de «querer dar un golpe de Estado». Fue durante la Comisión del Congreso para la Reconstrucción Social y Económica de España tras el coronavirus en el Congreso. «Aunque a veces parezca que más quieren dar un golpe de Estado que proteger la democracia española estoy dispuesto a dialogar con cualquiera», afirmó Iglesias ante Iván Espinosa de los Monteros, portavoz de Vox en el Congreso.

Esta grave acusación provocó la reacción inmediata de Espinosa de los Monteros, quien pidió al presidente de la Comisión, el socialista Patxi López, que tomase «cartas en el asunto». «Acaba de decir el ponente que nuestro grupo parlamentario parece que quiere dar un golpe de Estado. Es una manifestación absolutamente intolerable, que falta a la verdad y que es tremendamente ofensiva para nuestro grupo parlamentario y los cuatro millones de personas que le han votado», expuso Espinosa para exigir una rectificación de Iglesias.

Patxi López, en lugar de llamar al orden a Iglesias por sus afirmaciones, salió en su defensa. «Ha dicho que ‘parece que’, no que vaya a dar un golpe de Estado. No tiene la misma categoría», defendió el ex lehendakari, opinando también que «aquí alguno tiene la piel muy fina».

Iglesias se negó a retractarse y optó por añadir más tensión: «Voy a ser más preciso. Creo que les gustaría dar un golpe de Estado, pero que no se atreven. Además de desearlo, y pedirlo hay que atreverse».

«Esto es un espectáculo lamentable, no voy a tolerar esto», respondió Espinosa mientras se levantaba de su asiento en la Comisión. «¿Y en qué se traduce que usted no lo vaya a tolerar?», preguntó Iglesias con ironía. Patxi López, mientras, aconsejó al líder de Podemos no entrar en «diálogos de este tipo». «Cierre la puerta al salir», le ha espetado Iglesias a Espinosa, mientras éste abandonaba la sala.