España

Sánchez se pliega a los separatistas en la mesa de negociación y pacta «desjudicializar la política»

El Gobierno de España liderado por Pedro Sánchez y la Generalitat de Cataluña han sellado este miércoles en la «mesa de diálogo» dos acuerdos para «desjudicializar la política» y para «impulsar y proteger la lengua catalana».

Así lo ha avanzado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, en una rueda de prensa tras la reunión que ha mantenido en el Palacio de la Moncloa la mesa de diálogo sobre Cataluña con delegaciones de ambos gobiernos.

Bolaños ha detallado que gracias a estos dos acuerdos se abandonan los «monólogos» y se abraza el diálogo como forma de hacer política, renunciando a acciones «que saquen la política fuera del juego democrático».

Entre las premisas que centran el pacto con la Generalitat sobre la lengua catalana, el ministro de la presidencia ha reconocido y valorado la ley sobre la protección de la lengua catalana aprobada por el Parlament con un 80% de consenso y ha señalado que el Gobierno aprueba que cada centro educativo tenga autonomía para reforzar la lengua que considere más oportuna, a pesar de la sentencia del Tribunal Supremo que pide garantizar que el 25% de las clases se den en castellano.

«Fortaleceremos la lengua catalana centrada en derechos y libertades del alumnado y el pleno dominio oral y escrito de todos los estudiantes», ha recalcado.

Bolaños ha resaltado la ley catalana como «un buen ejemplo de acuerdos trasversales muy amplios. Una ley que está perfectamente adecuada a la Constitución y al Estatuto de Cataluña».

El ministro de la presidencia ha concretado que en el impulso a la jurídico vigente y que la eventual mejora del marco normativo se ha de producir mediante mecanismos ya establecidos, además de que los acuerdos deben ser con mayorías «grandes».

«Se renuncia a acciones que dejen la política fuera del juego democrático», ha añadido tras incidir en que «nunca más el enfrentamiento estéril ya que ahora el compromiso es con acuerdos mayoritarios para superar los conflictos».

Bolaños ha incidido en que las instituciones públicas han de preservar el interés general y en referencia al acuerdo para impulsar la diversidad lingüística ha avisado que el objetivo es preservar la «riqueza» de las lenguas en España.

Sobre la posibilidad de reformar el delito de sedición que solicita la Generalitat catalana Bolaños ha insistido en que no existe en estos momentos la mayoría parlamentaria «transversal y amplia» que el Gobierno cree necesaria para ello y ha asegurado que este asunto no se ha tratado en la reunión de hoy.

«Negociación»

Hasta hoy, cuando se ha mandado a la prensa la convocatoria de la reunión que mantendrán este miércoles en Madrid el Gobierno y la Generalitat, el Ejecutivo repetía sin cesar que lo que ambas administraciones habían establecido era «una mesa de diálogo». El gabinete de Pedro Sánchez trataba así de restar la importancia y la grandilocuencia que los separatistas le querían dar al foro. Pero todo ha cambiado.

Tras múltiples correcciones en privado y en público, incluso en ruedas de prensa, negando que se tratase de una mesa de negociación, el Gobierno admite ya que está negociando con los independentistas de la Generalitat de forma bilateral. Por primera vez, tanto en la nota enviada a los medios como en la agenda oficial, Moncloa habla abiertamente de “Mesa de diálogo y negociación entre el Gobierno de España y el Govern de la Generalitat de Catalunya”.