Sánchez confía de nuevo en Calvo la negociación de los apoyos para la segunda investidura
Calvo ya se puso al frente de las reuniones negociadoras con Podemos durante el último debate de investidura, pero no consiguió cerrar un acuerdo beneficioso para su partido.


La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, volverá a dirigir las negociaciones por parte del Partido Socialista para recabar los apoyos necesarios para que el presidente, Pedro Sánchez, reciba el encargo de someterse al debate de investidura tras la segunda ronda de consultas que en las próximas semanas abrirá el Rey Felipe Vl.
El secretario general socialista confía de nuevo en su número dos en el Gobierno para mantener los contactos con los principales partidos políticos, con el objetivo de sumar los votos necesarios para recibir la confianza del Congreso de los Diputados y poner fin así al bloqueo político que hay desde el pasado 23 de septiembre.
Calvo ya se puso al frente de las reuniones negociadoras con Podemos durante el último debate de investidura, pero no consiguió cerrar un acuerdo beneficioso para su partido. Las exigencias de Podemos, según un documento filtrado desde el gabinete de la propia vicepresidenta, y la negativa del PSOE a ceder en áreas como Trabajo o Transición Energética, frustró las reuniones entre Carmen Calvo y el negociador podemita Pablo Echenique.
Adriana Lastra y la ministra de Hacienda, Maria Jesús Montero, asistirán a Calvo durante todo el proceso
Aunque la vicepresidenta en funciones será la máxima responsable de las negociaciones, Sánchez también ha pedido a la vicesecretaria Adriana Lastra y a la ministra de Hacienda, Maria Jesús Montero, que asistan a Calvo durante todo el proceso. Las tres ya negociaron con Podemos en el tramo final de las negociaciones fallidas.
Las tres dirigentes socialistas deberán rendir cuentas con el director del gabinete de La Moncloa, Iván Redondo, que dirigirá la estrategia junto al secretario general de la Presidencia, Félix Bolaños, el responsable de preparar la documentación necesaria para que Calvo, Lastra y Montero seduzcan al resto de formaciones políticas para contar con su apoyo durante el segundo debate de investidura, que casi con total probabilidad se producirá en septiembre.