El pucherazo de Colau: un vídeo destapa las trampas de su ‘multiconsulta’ sobre iniciativas populares
Pucherazo en la ‘multiconsulta’ que la alcaldesa de Barcelona pretende convertir en el proyecto estrella de su mandato. Un vídeo de la plataforma Rescatem Barcelona colgado en las redes sociales destapa las irregularidades cometidas en la recogida de firmas necesarias para la ‘multiconsulta’ que el gobierno de Ada Colau celebrará antes de verano, y para cuya realización ya ha gastado más de 3,5 millones de euros.
La plataforma considera que la recogida de las 15.000 firmas exigidas que debían reunir las iniciativas ciudadanas para incluir su pregunta en la ‘multiconsulta’ no ha reunido las garantías mínimas, por lo que «más que una ‘multiconsulta’, es una tomadura de pelo», aseguran.
En el vídeo, grabado con una cámara oculta, se escucha cómo una persona que estampa la firma sin presentar su DNI pide hacerlo también por su madre. Argumenta que sale pode de casa. La encargada de recoger las firmas le responde que puede hacerlo si firma por ella.
Por otro lado, en un bar, quien recoge las firmas explica a una mujer que tiene una duda que en realidad desconoce el funcionamiento de la recogida y el objetivo de la consulta, y que sólo sabe que deben rellenarlo los empadronados en la ciudad.
En un apunte en Facebook, la plataforma ha tachado de pantomima la recogida de firmas para la ‘multiconsulta’, en la que las iniciativas ciudadanas quieren preguntar sobre tres asuntos: la remunicipalización de la gestión del agua, el cambio de nombre de la plaza Antonio López y la compra del edificio de Gimnàs Sant Pau para ubicar vivienda pública.
Las tres iniciativas ciudadanas que promueven las preguntas entregaron las firmas este jueves a la concejala de Participación, Gala Pin. En los tres casos se superaron las 15.000 exigidas, pero sin excesiva holgura: la pregunta del agua recogió 27.300 mientras que las otras dos superaron de poco las 17.000. En cualquier caso, unas cifras raquíticas de participación ciudadana para avalar la ‘macroconsulta’ con la que Colau pretende justificar su ambicioso proyecto de ‘democracia popular’.
Inseguridad jurídica
El Reglamento de Participación Ciudadana que ampara la ‘multiconsulta’ también presenta dudas sobre las garantías jurídicas. En enero se presentaron dos recursos contencioso-administrativos ante el Tribunal Superior de Justicia de Barcelona firmados por la Delegación del Gobierno en Cataluña y por la Cámara de Concesionarios y Empresas vinculadas al sector público (CCIES).
El Gobierno entiende que se está vulnerando la democracia representativa, ya que «en aquellos casos en los que exista una iniciativa ciudadana no es necesario un acuerdo del pleno ni su aprobación por la mayoría absoluta del mismo». Los empresarios alegan que «el ayuntamiento incluye cláusulas donde cuestiona los contratos existentes».
Colau tiene previsto celebrar la ‘macroconsulta’ durante toda una semana en mayo o junio. Sus resultados serán vinculantes siempre que las medidas sometidas a votación logren el respaldo del 50 % del padrón de personas mayores de 16 años.