Podemos se querellará contra ex responsables de Interior si ordenaron a Villarejo espiar a Iglesias

El secretario de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, explica en una entrevista con Europa Press que se han personado ya en la causa porque consideran que es una situación «enormemente preocupante» ya que se ha tratado de «dañar a los rivales políticos» utilizando las instituciones de todos «en beneficio propio».

Ayer mismo, el comisario jubilado y ahora en prisión provisional
estaba citado ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón para detallar la información que dice tener sobre la «autoría real» de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid. Según su abogado, Antonio García Cabrera, el excomisario ha relacionado el robo del teléfono móvil de una asesora del líder de Podemos Pablo Iglesias y la difusión posterior de la información privada que contenía con una «investigación policial».

«Todo es una cuestión de una investigación policial y él por supuesto, sólo la ha vehiculizado en el ámbito policial», señaló el letrado en relación a la información contenida en aquel teléfono móvil, que, según ha dicho, se habría almacenado en un pen drive.

Ante este hecho «muy preocupante», el responsable económico de Podemos, asegura que su formación está estudiando querellarse si se confirma que el Ministerio del Interior tenía conocimiento y formaba parte de la investigación en curso, ya que, afirma, «supondría que el Ministerio del Interior bajo el periodo de Mariano Rajoy ha sido utilizado políticamente en contra de los propios valores de la democracia para dañar a un rival político».

«De confirmarse sin duda abre las opciones a querellarse porque sería una situación inédita e insólita en las democracias europeas, la utilización de las instituciones de todos en un contexto en el que las encuestas daban como potencial ganador a Podemos de esas elecciones», ha explicado.

En este sentido, ha insistido en que la «utilización de las instituciones para enfangar a un rival político, para erosionarlo y para arrojar mentiras en medios de comunicación, en connivencia con esos medios, abre el espacio para una querella que debería ser planteable en caso de que se confirme».