España
Educación

El Gobierno pide a las escuelas que difundan la Ley Trans y la del ‘sólo sí es sí’ entre los alumnos

El Consejo Escolar emite una guía para "superar los estereotipos y prejuicios de género"

El Gobierno quiere espías en los recreos para que los niños no empujen a las niñas «a la periferia»

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El Consejo Escolar del Estado, principal órgano consultivo del Gobierno en el ámbito educativo, ha elaborado una guía para promover la «igualdad de género» en los centros escolares «superando los estereotipos y prejuicios». El documento recoge varias propuestas a implementar en estos centros, tanto en el ámbito organizativo como en los contenidos. Entre esas medidas se insta a difundir la legislación sobre «igualdad», «perspectiva de género», «respeto a la diversidad afectivo-sexual» y de «identidad de género», citando por ejemplo la ley del sólo sí es sí, que ya ha beneficiado a más de 700 agresores sexuales, de los cuales, 70 han sido excarcelados. La medida también abarcaría la Ley Trans, recientemente aprobada, y que regula lo relacionado con la «identidad de género», permitiendo el cambio de sexo en el registro a partir de los 12 años sin informes médicos ni tratamientos hormonales.

La guía pide mantener, de forma actualizada, toda esta legislación accesible a través de la página web del centro, además de programar espacios y campañas para su difusión y conferencias abiertas a la comunidad educativa y a la ciudadanía en general. Estos materiales, se indica, deberán adecuarse también para menores y jóvenes. Para ampliar su divulgación se pide diversificar los canales, aprovechando por ejemplo las redes sociales.

Patios y baños

Como ha informado OKDIARIO, el documento reclama también reorganizar los espacios de los centros, transformando los patios de recreo en «espacios más amables y promotores del encuentro y la igualdad». Para ello, se plantean varias actuaciones, como «organizar una comisión de centro para la creación del patio deseado» o «analizar el patio actual desde la perspectiva de género». En ese examen del espacio de recreo se pide determinar «quiénes ocupan la centralidad y la periferia de los espacios» y «qué dinámicas relacionales se dan». La propuesta se fundamenta en la reclamación feminista de reorganizar estos espacios escolares, criticando que, habitualmente, los niños ocupan el centro del patio al practicar actividades deportivas como el fútbol, mientras las niñas se ven desplazadas a los márgenes. Quienes critican esa distribución consideran que provoca una segregación entre sexos y proponen rediseñar el patio, con nuevas actividades más «inclusivas».

El Consejo Escolar marca también cómo deben ser los baños y vestuarios para que «favorezcan la convivencia», superando «los estereotipos, prejuicios, roles y actitudes sexistas». También se propone que los propios alumnos «autogestionen» el comedor, asignando las tareas «sin roles sexistas», incluso sin «ninguna diferencia por sexo en menús» o revisar los «criterios» para la creación de grupos, «con el objetivo de la paridad o tender hacia ella». Esa representación paritaria se aplicaría también a los equipos directivos, departamentos e incluso a las asociaciones de madres y padres, las AMPA, que deberían cambiar esa denominación por otra más «inclusiva».

En el caso de la biblioteca, se pide una zona específica dedicada en exclusiva al «feminismo, la coeducación, la diversidad de orientación sexual y de identidad de género, la educación afectivo-sexual o la prevención de la violencia». En cuanto a los contenidos, se reclama la inclusión de los contenidos sobre «educación afectivo-sexual» en todas las etapas del sistema educativo, así como identificar «micromachismos o machismos cotidianos» entre el alumnado.

La Ley Trans ya establece que el Gobierno «incluirá entre los aspectos básicos del currículo el conocimiento y respeto de la diversidad sexual, de género y familiar de las personas LGTBI». Además, la Ley del sólo sí es sí obliga a integrar contenidos basados en la «pedagogía feminista» sobre «educación sexual e igualdad de género y educación afectivo-sexual para el alumnado».