Frente de Díaz con Podemos contra un pacto de Estado para bajar los impuestos de la gasolina y la luz

Pedro Sánchez pide «unidad» a los grupos parlamentarios para alcanzar un pacto de Estado que permita el Plan de Respuesta Económica a la guerra de Vladímir Putin. Pero ni en su propio gobierno tiene garantizados los apoyos para sacar adelante su propuesta. Yolanda Díaz y Unidas Podemos, que tal como avanzó OKDIARIO este martes, alcanzaron un acuerdo para rechazar el aumento del gasto en Defensa que defiende Sánchez, impedirán también este pacto de Estado que reivindica el PSOE en las Cortes Generales. Los podemitas no quieren una bajada de impuestos generalizada, como reclama la oposición, con el rencor aún de enterarse de algunas de las medidas anunciadas por el presidente a través de la prensa.

Si bien, a Díaz apoyar el envío de armas a Ucrania que decidió Sánchez prácticamente no le genera ningún impacto electoral, el papel que adopte en materia fiscal sí. Y ahí marca distancias. De hecho, será uno de los temas que utilizará Podemos para desmarcarse de sus socios socialistas de aquí al final del mandato y en campaña electoral. Díaz y los morados siguen empeñados en llevar a cabo una reforma fiscal que por ahora descartan en el PSOE. Más aún con la incertidumbre sobre los efectos de la invasión rusa en la economía. La vicepresidenta y Podemos abogan por una redistribución de la presión fiscal para que paguen quienes más tienen y rebajar el IRPF solo a las rentas bajas.

Así pues, la opción de rebajar los impuestos, que abanderó el PP en la Conferencia de Presidentes Autonómicos de La Palma, parece que se va diluyendo. El presidente de la Xunta y líder in pectore de los populares, Alberto Núñez Feijóo, alcanzó un acuerdo con la ministra Isabel Rodríguez para aprobar una declaración respaldada por todas las autonomías que abogaba por esa bajada impositiva. De hecho, Sánchez iba a anunciarla el lunes. Pero la falta de acuerdo dentro de la propia coalición, y el miedo del PSOE a que el PP les pueda dejar tirados, ha hecho modificar la posición del Gobierno. Seguramente, incumplirá esa declaración que no pudo acabar en pacto por la falta de concreción.

Díaz defiende la implantación de un impuesto extraordinario a las eléctricas, tal y como propone Unidas Podemos, que haga reducir los beneficios que tienen las principales compañías del sector del país.»Las tres grandes eléctricas incrementaron un 47% sus beneficios antes de impuestos en 2021, con 10.022 millones de euros, y tienen que contribuir a esta crisis», ha defendido la vicepresidenta segunda, para argumentar que «en este contexto de crisis, tienen que redistribuirse esos beneficios». También esgrime a sus socios la necesidad de congelar los precios de los alquileres ante la escalada del IPC.

Pérdida de ingresos

Con la rebaja de impuestos que reclama la oposición, quién más pierde es el Gobierno. De hecho, acusan al gabinete de Sánchez de retrasar la decisión para recaudar más. Al tocar los tipos impositivos que graban los carburantes, la luz o el gas, el Ejecutivo dejaría de ingresar millones de euros. Sólo las actuales rebajas fiscales en la factura de la luz supondrían una reducción en la recaudación de entre 10.000 y 12.000 millones de euros hasta final de año y no contendrían la inflación si siguen subiendo los precios, según fuentes de Podemos.

España actuará al margen de Europa

Haya o no consenso a nivel europeo sobre como abaratar los costes de la energía, en el Consejo Europeo de los días 24 y 25 de marzo en Bruselas, el Gobierno apostará por una bajada de los precios que será «inmediata y sencilla» para los hogares, las empresas y los autónomos españoles, según  avanzó este miércoles tras la reunión mantenida con el PP el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños. El Ejecutivo, por eso, no concreta por ahora como lo va a hacer. De hecho, hay varias fórmulas que se estudian sin consenso en el Gobierno.