PP MADRID

El congreso del PP de Madrid será en mayo: así lo quiere Ayuso y Feijóo la respalda

A la presidenta madrileña le gustaría lo más cerca posible del 4M, aniversario de su victoria en las autonómicas

“Ayuso confía plenamente en Feijóo” aunque el congreso tuviera que retrasarse a primeros de junio

La presidenta “ha dado instrucciones para ayudar a Feijóo en lo que necesite y que el congreso de Sevilla sea un éxito”

El nuevo Comité Ejecutivo Nacional lanzará en abril el rosario de congresos regionales que dejaron pendientes Casado y García Egea: “Feijóo quiere cerrarlos al máximo este verano”

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Congreso PP Madrid
Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso.

Alberto Núñez Feijóo hará lo posible para que el congreso del PP de Madrid pueda celebrarse en mayo como le gustaría a la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso. Fuentes de toda solvencia dan, incluso, por hecho, a OKDIARIO que el congreso será en mayo y que Feijóo y Ayuso ya lo tienen hablado entre ellos a la espera del momento y forma en que el nuevo líder del PP lo anuncie tras el congreso nacional de Sevilla. La fecha está por concretar. Sólo una cuestión de plazos estatutarios podría retrasarlo, como mucho, a primeros de junio. El congreso del PP de Madrid será el primero en celebrarse de todos los que están pendientes.

La idea de la presidenta madrileña -y así se lo trasladó a Feijóo- es intentar que sea lo más cerca posible del primer aniversario de su arrolladora victoria electoral del 4 de mayo del año pasado. Mayo es, además, un mes muy significado para Madrid: el 2 de mayo es el Día de la Comunidad de Madrid y el 15 es San Isidro, patrón de la capital.

Feijóo está por la labor -confirman diversas fuentes- de acelerar no sólo el congreso regional de Madrid, sino el rosario de congresos regionales que Casado y García Egea dejaron pendientes. Ayuso “confía plenamente” en el presidente gallego y fuentes del PP madrileño confirman que “la presidenta ha dado instrucciones de ayudar a Feijóo en lo que necesite para que haga su congreso nacional en Sevilla y sea un éxito”. Es más, “le preocupa -dicen- que parezca que quiere presionarle o marcarle el paso con el congreso madrileño. Nada más lejos de la realidad. Confía plenamente en él y en lo que decida”.

Feijóo y Ayuso, «de la mano»

Alberto e Isabel van de la mano”, dice otro alto dirigente del PP. El clima de confianza entre ambos lo confirman diversas fuentes: “La voluntad de ambos es la mejor”. En una entrevista a OKDIARIO, Isabel Díaz Ayuso afirmaba, hace unos días, que la llegada de Feijóo había dado “paz” al partido y destacaba los valores del presidente gallego. “Es un hombre seguro de sí mismo”, decía, en lo que pareció una comparación con Pablo Casado. Al hablar de la fecha del congreso regional, a preguntas de Eduardo Inda, la presidenta madrileña se mostró relajada y esbozó una ligera sonrisa. “Le corresponde al presidente Feijóo anunciarlo”, señaló.

Plazos estatutarios

Fuentes solventes del PP señalan que “la voluntad de Feijóo es cerrar este mismo verano, si es posible, la mayoría de los congresos regionales pendientes” para poner en marcha la maquinaria electoral del partido con vistas a las elecciones autonómicas y municipales de mayo de 2023. Son los congresos regionales de Extremadura, La Rioja, Cantabria, Asturias y Murcia, además de Madrid. País Vasco y Cataluña también están pendientes, pero sus calendarios electorales dan más margen. Acelerar el congreso de Madrid a mayo, como quiere Ayuso, facilitaría dejar uno menos para los fines de semana de junio y julio.

Un dirigente del PP lo expresa así: “Se trata de volver a lo que hacían Aznar y Rajoy, que juntaban en dos meses todos los congresos y se pasaban todos los fines de semana de congreso en congreso por España, pero cerraban ese proceso en poco tiempo y daban estabilidad al partido”. Exactamente lo contrario de lo que Pablo Casado y Teodoro García Egea han hecho “mareando la perdiz y dilatando todo para intentar controlar hasta el último de los congresos provinciales y locales de cualquier rincón de España”, señalan las fuentes. En el caso del PP madrileño, “han tenido abierto en canal el partido durante año y medio sin necesidad alguna”.

El calendario

La llave de todo este proceso la tiene Alberto Núñez Feijóo. Quienes le conocen recuerdan que es una persona “absolutamente previsible y escrupulosa con las formas, los plazos y las personas. Ahora mismo está centrado en el congreso de Sevilla, el mensaje que llevará, elegir a su equipo y que su nuevo secretario general se ponga en marcha”. La previsión -a día de hoy- es que el mes de abril, pese a la Semana Santa, sea un mes intenso para los nuevos dirigentes nacionales del PP.

Feijóo será proclamado como nuevo presidente nacional del partido en el congreso de Sevilla de este próximo viernes y sábado, 1 y 2 de abril. El día 3 ó 4 se celebrará el primer Comité Ejecutivo Nacional con el nuevo secretario general del PP y sus vicesecretarios. Tradicionalmente, ese primer Comité Ejecutivo es más formal que otra cosa (“hasta para otorgar los poderes legales”) y sirve para mostrar públicamente la foto de la nueva dirección tomando posesión del partido.

A partir de ahí, a efectos del congreso madrileño, todo depende de Feijóo y de las órdenes que dé. El Comité Ejecutivo Nacional es el que marca un calendario de congresos regionales, “una estrategia y unos plazos”. Luego son las Juntas Directivas regionales las que convocan formalmente los congresos en fechas concretas. En el PP creen que, de no ser en ese primer Comité Ejecutivo del 3 ó 4 de abril donde se autoricen los congresos regionales, Feijóo convocaría, durante abril, uno o varios comités extraordinarios para esta y otras cuestiones urgentes.

Pío García-Escudero

Si el Comité Ejecutivo Nacional da el pistoletazo de salida en abril a los congresos regionales, el siguiente paso para que el congreso del PP de Madrid pudiera ser en mayo sería que Pío García-Escudero, presidente provisional del PP madrileño, reuniera a la Junta Directiva Regional para hacer la convocatoria formal del congreso. De la prisa que se dé García-Escudero en reunir a la Junta dependerá que el congreso regional pueda llegar a ser en mayo, como quiere Ayuso, e, incluso, lo más cerca posible al 4M. Máxime porque entre la convocatoria de la Junta Directiva y su celebración han de pasar 5 días y la Semana Santa es a mitad de abril. Todas  las fuentes consultadas coinciden sin ninguna duda: “Pío hará lo que le diga Alberto [Núñez Feijóo] o, por delegación, el nuevo secretario general”.

Desde la convocatoria han de pasar 45 días para un congreso ordinario y un mes para un congreso extraordinario. Fuentes del PP confirman que, en la situación del PP de Madrid y tras todo lo vivido, “puede perfectamente convocarse un congreso extraordinario”, que sería -como desea Ayuso- en mayo. Incluso, hay quien no descarta, para facilitarlo, la dimisión de la actual dirección provisional con Pío García-Escudero y Ana Camins.

Ayuso ganará: “Mirar hacia adelante”

La presidenta madrileña será, salvo enorme sorpresa, la única candidata a presidir el PP de Madrid. En una reciente entrevista a OKDIARIO, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se descartó y mostró su apoyo a Ayuso. Los dirigentes del PP madrileño que usaron Pablo Casado y Teodoro García Egea para intentar debilitar a la presidenta madrileña no van a presentarse tampoco. Han quedado desactivados con la salida de sus mentores. La victoria de Ayuso se da por hecho. Se cerrará, así, el largo periplo hasta este congreso regional. Una batalla interna encarnizada que ha terminado con la carrera política de Casado y Egea.

En el PP madrileño hay interés por “mirar hacia adelante” y agilizar el congreso regional para poner en marcha, de nuevo, cuanto antes, la maquinaria electoral. En un año -mayo de 2023- hay de nuevo elecciones autonómicas y municipales. Ayuso tiene dos objetivos: alcanzar la mayoría absoluta y, tan importante o más, ampliar su dominio municipal aplastante en la región, recuperando importantes ciudades, especialmente del sur y también del Corredor del Henares, que cayeron en manos de la izquierda en 2019. Ayuso quiere tener, para ello, el control del partido, la posibilidad de decidir listas electorales y toda su capacidad de movilización política sin zancadillas internas.

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