Caos en la M-30: tres horas de atasco por una avería en plena hora punta
Un vehículo averiado en el Puente de Vallecas provoca el colapso de la circunvalación madrileña en el peor momento posible


La M-30 se ha convertido este lunes en un auténtico infierno para miles de conductores madrileños que han sufrido retenciones de hasta tres horas debido a una avería que ha colapsado por completo la circulación en uno de los tramos más transitados de la capital.
El caos comenzó a primera hora de la mañana cuando un vehículo quedó completamente detenido en mitad del carril central de la calzada exterior de la M-30, justo en la zona del Puente de Vallecas. La avería, que obligó a cortar el carril central en el punto kilométrico 10+200 en sentido A-3, se produjo en el peor momento posible: en plena hora punta.
«Vehículo averiado en M-30, en la zona del puente Vallecas. Ha sido cortado el carril central de la calzada exterior, pk 10+200 (sentido A-3). Empeoran las retenciones habituales de hora punta en la zona», alertaba el Centro de Gestión de Movilidad de Madrid a través de sus redes sociales.
Pero la pesadilla no terminó ahí. Como si de un efecto dominó se tratase, dos vehículos más quedaron detenidos a escasos kilómetros del primer incidente, convirtiendo la M-30 en un auténtico parking. Los coches averiados se localizaron en la avenida de la Paz, a la altura de la avenida de Entrevías, y posteriormente cerca de la A-3, multiplicando exponencialmente el caos circulatorio.
Miles de conductores se vieron atrapados en colas kilométricas que se extendían por toda la circunvalación madrileña, con algunos usuarios reportando tiempos de espera de hasta tres horas para recorrer trayectos que habitualmente se completan en 20 minutos.
Como si los problemas mecánicos no fueran suficientes, el inicio de las obras para la construcción del controvertido mega parque sobre la M-30 en la zona de Ventas ha complicado aún más la situación. Este ambicioso proyecto, que se ejecutará durante los meses de verano, ya está generando restricciones adicionales en una infraestructura que de por sí sufre saturación diaria. La combinación de las averías múltiples con el inicio de estas macro obras ha creado la tormenta perfecta para el colapso circulatorio más grave de lo que va de año en la capital.
Los conductores que tuvieron la mala suerte de coincidir con este cóctel explosivo de incidencias han vivido una auténtica odisea. Las redes sociales se llenaron de quejas y denuncias de ciudadanos que llegaron tarde al trabajo, perdieron citas médicas y sufrieron el estrés de estar atrapados en sus vehículos durante horas.
Finalmente, tras más de tres horas de calvario, el Centro de Gestión de Movilidad anunciaba el fin de la incidencia: «Ha finalizado la incidencia en M-30, en la zona del puente Vallecas, de la calzada exterior (sentido A-3), se abre al tráfico el carril que permanecía cortado».