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El PP prepara una demanda por prevaricación contra Sánchez por el decretazo de RTVE

Rafael Hernando
Rafael Hernando, portavoz del PP en el Congreso de los Diputados. (Foto: EFE)
Luz Sela
  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El Partido Popular estudia otras vías paralelas al recurso al Tribunal Constitucional para frenar la renovación del Consejo de Administración de RTVE, aprobada por decreto el pasado viernes. Fuentes ‘populares’ admiten que sobre la mesa está una demanda contra el presidente del Gobierno por prevaricación.

El partido ya avisó a Sánchez -en el anuncio de que recurriría el decreto- que podría haber incurrido en prevaricación. Ahora, los ‘populares’ no descartan ninguna vía para tratar de paralizar la renovación de RTVE, y entre ellas, una posible demanda contra Sánchez. 

El Gobierno aprobó el pasado viernes en Consejo de Ministros el real decreto, que tendrá ahora que ser validado en el Congreso en un plazo de un mes. En caso de no existir acuerdo, el Ejecutivo nombrará a un administrador único para que dirija la corporación. La vía del decreto solo está autorizada en situaciones urgentes, y la renovación deberá hacerse en todo caso por concurso público.

Desde el PP se ha calificado de «deplorable» que el Gobierno tenga como prioridad «hacerse con el control de RTVE para ponerla al servicio de Sánchez» y lo haga «interfiriendo de forma ilícita y caciquismo en el procedimiento legislativo aprobado por el propio Partido Socialista».

Nuevo presidente en un mes

El Congreso y el Senado tendrán que elegir ahora, en la próxima semana -el plazo es de 15 días- a los diez miembros del Consejo de Administración de la corporación pública. De entre ellos, se elegirá al presidente, que asumiría el cargo en el plazo de un mes.

El Gobierno tiene ese mismo plazo para convalidar el decreto en el Congreso, para lo que espera contar con una «mayoría de diputados», los mismos que permitieron la moción de censura contra Mariano Rajoy: Podemos, partidos independentistas, PNV y Bildu. PP y C’s se oponen.

El decreto incluye además la posibilidad de que, en caso de que el PP trate de bloquear el nombramiento de los cuatro consejeros que corresponden al Senado, esa decisión correspondería al Congreso.

«Si el Senado hubiera elegido a dos, el Congreso los respetaría y sumaría a sus seis otros dos más», se ha explicado desde el Gobierno. Los socialistas también se han precavido del supuesto de que exista un bloqueo general: en ese caso, se nombraría a un administrador único provisional que tomaría las riendas de la corporación.

La intención del Ejecutivo es que el nombramiento sea provisional, hasta que el concurso se celebre. Sin embargo, en ningún momento se ha especificado cuál será la duración de ese periodo transitorio.

Aún sin mayoría

No obstante, el Gobierno podría encontrarse con dificultades inesperadas para sacar adelante el acuerdo parlamentario. Y vienen de ERC, un aliado con el que Sánchez sí contaba para la suma. Los independentistas -cuyos nueve diputados son cruciales para que el decreto sea convalidado- condicionan cualquier negociación a que se abra un «diálogo bilateral» con el Govern de Torra, sin exigencias.

El portavoz de la formación, Joan Tardà, avisó a Sánchez de que «si no están dispuestos a asumir algo tan elemental como que todos nos sintamos integrados en el diálogo y dejan al margen al 50% o al 60% de la ciudadanía catalana, no esperen colaboración de Esquerra Republicana».

El motivo de la discordia es la moción que esta semana ERC presentó en el Congreso en la que reclamaban un diálogo «sin condiciones y sin renuncias» entre «el Reino de España y la Generalitat de Cataluña» como solución a la crisis política en esa comunidad. La iniciativa fue tumbada por el PP, el PSOE y Ciudadanos, mientras que Unidos Podemos, el PNV y el PDeCAT la han respaldado.

Fuentes de ERC consultadas aseguran que aún no han decidido su posición ante la inminente renovación del consejo de RTVE que el Gobierno ha forzado vía decreto, un apoyo que el PSOE daba por hecho.

“No lo hemos debatido aún”, aseguran esas fuentes que avisan de que tras el rechazo del PSOE a la moción “la relación queda tocada”.

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