El sector del acero señala que los aranceles «ponen en riesgo miles de empleos cualificados en España»
La patronal del acero recuerda el valor que tiene esta industria para el conjunto de la economía


El sector del acero continúa en tensión ante el empeño del presidente de Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, de imponer aranceles a sus productos a nivel mundial. Carola Hermoso, directora general de Unesid, asociación que representa a esta industria, asegura que las empresas que llevan a cabo esta actividad generan en España «miles de empleos directos e indirectos». Unos puestos de trabajo «de alta cualificación» que las tarifas americanas ponen «en riesgo».
«Desde la Unión de Empresas Siderúrgicas queremos expresar nuestra profunda preocupación ante la decisión de Estados Unidos de reintroducir aranceles al acero europeo», ha asegurado Hermoso.
En ese sentido, Unesid considera que la escalada arancelaria americana provoca un retroceso en los mercados: «Se trata de una medida injustificada que vuelve a situarnos en un escenario similar al de 2018, cuando la administración estadounidense impuso restricciones comerciales que afectaron gravemente a la industria siderúrgica española y europea».
Por ello, la patronal del acero recuerda el valor que tiene esta industria para el conjunto de la economía española: «El sector siderúrgico es clave para la economía y el empleo. Contamos con una industria moderna, competitiva y comprometida con la transición hacia un acero más sostenible. Generamos miles de empleos directos e indirectos y contribuimos significativamente al PIB nacional».
En especial, la representante siderúrgica insiste en que «la imposición de estos aranceles pone en riesgo la estabilidad de un sector estratégico y el mantenimiento de empleos industriales de alta cualificación».
Y es que España exporta al año «alrededor de 250.000 toneladas de acero» a EEUU, algo que supuso «el 3,3% del total» de las «exportaciones siderúrgicas en 2024». «Este comercio generó un volumen de más de 400 millones de euros», ha advertido también Hermoso.
No obstante, el sector del acero español se encuentra, desde hace tiempo, en una situación complicada si se tienen en cuenta las relaciones con EEUU, pues sus «exportaciones no han crecido respecto a niveles previos a los primeros aranceles en 2018».
Con todo, Unesid considera que lo que España vende al país americano no supone «una amenaza para la industria estadounidense, al contrario, contribuye a cubrir una demanda que en muchos casos la industria local no puede satisfacer».
«La reintroducción de estos aranceles no solo afecta a nuestras empresas, sino que también va a generar distorsiones en el comercio internacional del acero. Y esto ya en un contexto de sobrecapacidad global», ha denunciado la directora de la patronal.
Medidas contra los aranceles al acero
De esta manera, la asociación exige a las autoridades que tomen medidas para calmar los ánimos en medio de la guerra comercial: «Nosotros creemos que es un problema que debe abordarse con un enfoque coordinado entre gobiernos, empresas y organismos internacionales».
Además, todo lo anterior se suma al resto de dificultades que ya sufre la industria siderúrgica, como «la competencia feroz de importaciones procedentes de Asia y otras regiones»: «Son importaciones que no cumplen las mismas reglas de juego que las europeas, ni de protección ambiental, ni de seguridad, ni de condiciones laborales. La Unión Europea debe reaccionar con firmeza, al igual que ocurrió en 2018. Es imprescindible que se implementen medidas de reequilibrio para proteger a nuestras empresas y a nuestros trabajadores».
En definitiva, Hermoso coincide con la «presidenta de la Comisión Europea» en que «los aranceles son perjudiciales tanto para las empresas como para los consumidores», y considera que «requieren una respuesta proporcional y decidida por parte de la Unión Europea».
«Desde Unesid consideramos prioritario que la UE y EEUU reactiven de inmediato las negociaciones para alcanzar así un acuerdo estable y duradero que garantice una estabilidad en las relaciones comerciales a largo plazo. Asimismo, instamos a la UE a trabajar en acuerdos internacionales que ayuden a corregir la sobrecapacidad del mercado y a defender una competencia leal a nivel global», ha reclamado.